OAXACA, Oax. (apro).- La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) consideró fundamental garantizar la libertad de expresión frente a la crisis sanitaria, porque el gremio periodístico, subrayó, también se enfrenta a múltiples riesgos que van desde la sobreexposición en su salud, hasta agresiones y detenciones en el marco de las medidas restrictivas por la pandemia de covid-19. Los comunicadores se trasladan de un sitio a otro por su actividad profesional y dan cobertura informativa a distintas manifestaciones de protesta que necesariamente implican la concentración de personas. Además, abundó, es preocupante que este sector enfrenta condiciones desfavorables en cuanto a seguridad social, falta de equipo de protección, seguro médico y/o de vida, entre otras prestaciones que deberían de tener garantizadas al ejercer una profesión de alto riesgo. En tal sentido, la DDHPO hizo un llamado “a valorar las labores del personal médico que está en al frente de los esfuerzos para contener la pandemia, pero también es primordial reconocer la actividad de las y los periodistas en este momento, pues la información juega un papel clave para combatirla”. Las autoridades de los diferentes niveles de gobierno “deben garantizar la seguridad de las personas periodistas y reconocer la importancia social de su ejercicio y su relevancia en contextos complejos y emergentes como el que ahora vivimos, pues es gracias al flujo de información fidedigna, útil, objetiva y oportuna como las sociedades pueden tomar las mejores decisiones para la protección de sus derechos”, apuntó. El ombudsman Bernardo Rodríguez Alamilla mencionó que la gran cantidad de mitos, rumores, información falsa o errónea que han surgido con la pandemia y que ponen en riesgo la integridad física y emocional de las personas, sólo pueden combatirse garantizando la labor libre, segura y eficaz del ejercicio periodístico. De igual manera, destacó que hasta el momento no se han registrado en Oaxaca casos de covid-19 en ese sector, pero se ha tenido conocimiento de agresiones contra reporteros en retenes, así como por parte de particulares, derivadas de restricciones en la movilidad y el comercio. Ante ello, el órgano autónomo resaltó la necesidad de establecer mecanismos de protección para las y los comunicadores, que les permitan obtener una seguridad en materia de salud, así como en su actividad. Precisó que en lo que va de 2020, la DDHPO ha iniciado siete investigaciones por agresiones en contra de periodistas, y las más recurrentes han sido las de tipo físico, detenciones arbitrarias, bloqueo informativo, hostigamiento, amenazas de muerte, así como el robo de equipo de trabajo. En tanto, de 2015 a 2019 realizó 253 investigaciones derivadas de quejas y cuadernos de antecedentes relacionados con violaciones a los derechos de ese gremio. En 2015 el organismo defensor de los derechos humanos recibió 12 expedientes de queja e inició 31 Cuadernos de Antecedentes (CA), para 2016 se registraron 38 quejas y 49 CA; en 2017, 27 quejas y 36 CA; un año después, 11 quejas y 27 CA; y en 2019, siete expedientes de queja y 15 CA. Frente a la crisis sanitaria y económica derivada del covid-19, es preocupante que las y los comunicadores sigan enfrentando hostigamientos y agresiones en el ejercicio de la libertad de expresión, recalcó la Defensoría. Y reiteró que la libertad en el ejercicio periodístico es fundamental para las sociedades democráticas, debido a que cuando se daña a un periodista, no sólo se afecta esa labor, sino la posibilidad de la sociedad de informarse y tomar decisiones, aún más en tiempos de pandemia.