MONTERREY, NL, (apro).- Las empresas casineras con mayor presencia en la entidad alertaron sobre los problemas de clandestinaje, que podría generar el incremento de hasta un 50% del impuesto que pretende aplicarles este año el gobierno del estado.

La propuesta enviada por el ejecutivo estatal al Congreso Local contempla que el impuesto del 10% que se le aplica a cada establecimiento suba hasta un 15%, aunque esta alza impactaría directamente en la clientela, que tendría que pagar más en cada ocasión que apuesta.

El interés del gobierno nuevoleonés es hacer que se incrementen los mil millones que debe aportar al año por impuestos la industria en la localidad, dijo Guillermo Martínez, vocero del Consejo Regional de Industriales del Juego (Coriju) que reúne a las empresas Caliente, Revolución, Winland, Codere, Foliatti, Logrand y Play City que, en conjunto, reúnen 25 casas de apuestas en la localidad, que proporcionan unos 30 mil empleos directos y derivados.

El portavoz de los empresarios dijo que, en los últimos tres años, debido a afectaciones por la pandemia, cada negocio ha sufrido pérdidas por hasta 30% lo que hace que el impuesto aportado fuera de aproximadamente 700 mil pesos anuales, menos de lo esperado, aunque aún son la segunda fuente de aportaciones gravosas a las arcas estatales.

El recurso que generan los casinos está etiquetado para el área de seguridad Nuevo León.

Martínez explicó que la propuesta que recibieron los legisladores es en dos vertientes, una de las cuales es del cobro impositivo de 10% por cada máquina de juego, y el otro es del 15% por cada vez que el cliente pretende jugar lo que implica, por ejemplo, que, si bien hasta ahora el cliente tenía que dar al gobierno estatal 10 pesos de cada 100 que apuesta, ahora deberá dar 15.

“Al asistir a la sala de juego el cliente se va a dar cuenta de que este impuesto del 10 se le retiene para pagarle al Estado, pero lo que está sobre la mesa es que, si sube al 15, esto lo pagará el cliente que asiste. Ya ha habido reuniones con personas del Gobierno del estado para hacer la contrapropuesta”, señaló.

Este incremento, consideró Martínez García, no provocará que los mil millones que anteriormente ganaba la entidad se incremente hasta mil 500 en automático pues, al verse afectado, el cliente puede buscar otras alternativas de diversión de manera clandestina, lo que implica evasión y hasta inseguridad.

“El clandestinaje es un riesgo que la industria no se debe permitir, porque es estar fuera de la ley, hay menores de edad, condiciones de inseguridad, y el pago de impuestos se puede evadir y no llega al destino que puede llegar, lo mismo con las regulaciones sanitarias”, dijo.