Abasolo, Gto. (apro).- María Carmela Vázquez se convirtió en madre buscadora hace poco más de cuatro meses, tras la desaparición de su hijo Osmar Zúñiga Vázquez el 14 de junio pasado. El domingo 6 por la noche, la mujer de 46 años de edad fue asesinada a balazos afuera de su casa, en el centro de Abasolo.

De acuerdo con el parte de la policía municipal, a las 20:35 del domingo 6 se reportó que en la calle Leandro Valle casi esquina con Allende, en el centro de la ciudad, el cuerpo de una mujer estaba sobre la vía pública con varios impactos por arma de fuego. Al llegar al lugar personal de la Cruz Roja Mexicana constató que la mujer había fallecido.

En los primeros reportes de la autoridad municipal se expone que la madre de María Carmela declaró que en la noche del domingo llegaron a su domicilio dos personas a bordo de una motocicleta, preguntaron por su hija y al salir ésta le dispararon, luego se dieron a la fuga.

Carmela pertenecía al colectivo Personas Desaparecidas de Pénjamo con el que salía a hacer búsquedas en campo. Incluso, el sábado 5 por la tarde, junto con otras integrantes del colectivo, participó en la colocación en un árbol de las fotografías de personas desaparecidas del municipio de Abasolo y de la región con el propósito de crear memoria y concientizar a la población sobre el problema de desaparición de personas en el estado.

Datos reunidos por colectivos de búsqueda de Guanajuato revelan que actualmente suman 3 mil 520 personas desaparecidas.

En redes sociales, el colectivo Personas Desaparecidas de Pénjamo dedicó un par de publicaciones en honor a Carmela "que ha muerto en la lucha, por ella que se fue sin encontrar a su hijo".

El segundo mensaje fue dirigido a Osmar Zúñiga, el joven de 21 años de edad desaparecido en Abasolo hace casi cinco meses:

"Tu mami se fue sin verte por última vez, tu mami tenía la gran ilusión de darte un abrazo y decirte lo mucho que te ama. Osmar tu mami no estará físicamente para seguir con nosotros en este caminar, pero estamos Miles de familias buscándote".

En los últimos dos años han asesinado a tres personas buscadoras en Guanajuato: María Carmela, María del Rosario Zavala y Javier Barajas.

María del Rosario murió tras recibir disparos a quemarropa la madrugada del 16 de octubre de 2020 en el municipio de León.

Javier Barajas Piña, hermano de la maestra Lupita, víctima de desaparición y cuyo cuerpo fue localizado en las fosas clandestinas de Salvatierra, participó en los trabajos de búsqueda de su hermana, pero luego comenzó a trabajar para la Comisión Estatal de Búsqueda. A finales de mayo de 2021 fue asesinado en el centro de su natal Salvatierra.

Hasta el momento la única autoridad que se ha pronunciado por el ataque en contra de la buscadora es el comisionado estatal de Atención Integral a Víctimas, Sergio Jaime Rochín del Rincón, quien condenó el asesinato y aseguró que se brindará apoyo a su familia.