MÉXICO, D.F., 19 de enero (apro).- En los primeros tres días de operación del nuevo sistema de justicia penal acusatorio en el Distrito Federal, dos denuncias de amenaza y un intento de robo se resolvieron mediante la medicación y con ello se evitó llevar el caso ante un juez penal. Rodolfo Ríos, procurador general de Justicia del DF, ofreció estas cifras como un primer corte desde el pasado viernes 16 de enero, cuando se echó a andar este nuevo sistema para facilitar la solución de controversias. En entrevista, dijo que en ese lapso se han iniciado 161 carpetas de investigación, de las cuales 38 derivaron en procedimientos de mediación y, en al menos tres de estos casos, el problema se arregló con un convenio entre las partes involucradas sin necesidad de llegar al Tribunal Superior de Justicia del DF. Las demandas atendidas, explicó “han sido robos simples y amenazas principalmente”. Por ello, agregó, “no ha habido necesidad de solicitar ninguna audiencia ante el Juez de Control”. Ríos Garza detalló que en los casos resueltos por convenio se priorizó la reparación del daño de la víctima u ofendido, como resultado del mecanismo alterno de solución de controversias. El caso de robo se solucionó en una agencia de la Fiscalía de Venustiano Carranza a través de los facilitadores capacitados por la PGJDF. Otras denuncias, añadió, se han declarado incompetencias del Ministerio Público y se canalizaron al Juzgado Cívico para su solución.