CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La despenalización del aborto en la Ciudad de México “ha sido un fracaso en política pública”, ya que no ha disminuido la mortalidad materna, tampoco ha reducido su clandestinidad y lo único que ha provocado es restarle autonomía de decisión a las mujeres, dejándoles únicamente la opción de abortar. Tal es la conclusión a la que llega el informe “Aborto, la política de un Estado claudicante”, presentado por los investigadores Celia Mizrahi, Marcelo Bartolini, Fernando Zúñiga y Cándido Pérez. En el reporte se agrega que, a diez años de haberse despenalizado el aborto en la capital del país, éste representa 10.7% de las muertes maternas en la ciudad, tasa que está por encima de la media nacional, que es de 9.2%. También señala que se desconoce en qué condiciones se realizan nueve de cada diez abortos en la capital del país. Y para colmo, ninguna autoridad del sector salud tiene información sobre los abortos que se realizan en los hospitales privados, por lo que se ignora cuántas mujeres abortan, qué procedimientos se aplican, qué edades tienen y cuántas han muerto durante el procedimiento, entre otros datos que ayudarían a dimensionar la magnitud del problema. Asimismo, el informe señala que, según investigaciones académicas, en esta década se han realizado alrededor de 1.5 millones de abortos en la Ciudad de México, y no los poco más de 175 mil que dicen las autoridades sanitarias, ya que tan solo la clínica Marie Stopes –asienta el reporte– realizó 51 mil abortos en 2014 en esta ciudad.