CIUDAD DE MÉXICO (apro).– La Cámara de Comercio Servicio y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope) rechazó la propuesta de permitir a los “vagoneros” continuar con la venta irregular de productos de dudosa procedencia al interior de las instalaciones del Sistema de Transporte Colectivo Metro, a cambio de “limpiar y barrer las estaciones del mismo”. Mediante un comunicado, el organismo presidido por Federico Pérez Cruz advirtió que “la aceptación de tal propuesta concedería un peligrosísimo e injusto monopolio operativo y económico de las actividades económicas para tales agrupaciones de comerciantes ambulantes. Mismo monopolio que pondría en riesgo a la población capitalina. Y dañaría indudablemente la economía de la ciudad”. De acuerdo con la Canacope, se desplazarían a las empresas especializadas de limpieza, legalmente establecidas y socialmente responsables, que emplean, muchas veces, a adultos mayores y personas en situación de vulnerabilidad. En segundo lugar, habría un detrimento directo de las finanzas públicas de la Ciudad de México, legitimando la existencia de grupos que operan al margen de la ley al no pagar impuestos. Por si fuera poco, aumentaría el daño a la integridad física de los propios vendedores, que pasan largas jornadas en los vagones, en condiciones insalubres, sin seguridad social, siendo algunos de estos incluso menores de edad. El organismo del comercio en pequeño organizado también dejó claro que se pone en riesgo la vida y la salud de los usuarios del transporte, por no existir un control sobre el origen, calidad, caducidad o procedencia legal de los productos vendidos por estas asociaciones, mismas que no se responsabilizan ante ninguna autoridad, ni ante la Profeco, por posibles daños o perjuicios emanados de sus actividades. Pérez Cruz matizó que la petición de estos grupos para obtener becas y apoyos es un derecho abierto a todos los ciudadanos. Sin embargo, también recordó que, ante cuestiones de justicia, vamos “todos coludos o todos rabones”.

“Por lo cual, es fundamental y necesario que, conjuntamente a su petición de apoyos, ellos mismos se apeguen, con congruencia y honestidad, a las exigencias de la ley: tal como el resto de la población laboralmente activa”.