Tiendas Elektra, de Ricardo Salinas Pliego, sólo darán servicio bancario en CDMX
CIUDAD DE MÉXICO (apro). - La secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez, informó que la administración capitalina acordó con la empresa Elektra –del Grupo Salinas, del empresario Ricardo Salinas Pliego- que sólo mantuviera abierto el servicio bancario y de recepción de remesas por ser “actividades esenciales” en la emergencia sanitaria por covid-19.
Además, agregó que “hay que revisar” la razón por la que dichas tiendas siguen abiertas para ofrecer sus demás productos.
“Hay una actividad esencial que tienen esas tiendas, así como las tiendas Coppel, que es el servicio bancario y que significa la recepción precisamente de las remesas de las personas que están en otros países, o más bien, en Estados Unidos y que mandan recursos a los capitalinos”, explicó.
En videoconferencia, la funcionaria aclaró que esa es la razón por la que se mantienen abiertas las tiendas Elektra donde se venden electrodomésticos, telefonía celular, muebles, ropa y hasta motocicletas, pues en ellas hay sucursales de Banco Azteca, otro de los negocios del multimillonario Salinas Pliego.
Sin embargo, aclaró: “evidentemente que no hay un permiso para vender otro tipo de productos, sino específicamente hay que decirlo, es el tema, el buen servicio que prestan en el tema de tipo bancario y de recepción de remesas que son muy necesarias para nuestra comunidad”.
- ¿Entonces cabría ahí una especie de cierre parcial de las tiendas?
- Así es el acuerdo, digamos.
-No se está cumpliendo hasta ahora, según se ha podido observar. O sea, se puede entrar a comprar cualquier artículo de los que ahí se venden. ¿Va a haber alguna acción que ustedes van a emprender para acatar este cierre?
-Hay que revisar, hay que revisar, hay que revisarlo.
Ayer, la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) dio a conocer que en las oficinas de Grupo Salinas habría cinco casos confirmados de covid-19, en el contexto de que alrededor de 3 mil empleados han sido obligados a seguir yendo a trabajar con el argumento de que los servicios del consorcio son actividades esenciales.