México, D F, 3 de diciembre- Sin acuerdos entre las tres fracciones del Senado de la República, la terna que envió el presidente de la República para elegir al sucesor de Juventino Castro y Castro El órgano legislativo deberá esperar una nueva propuesta presidencial, que, en caso de no ser aprobada, abrirá la posibilidad de que sea el mismo Vicente Fox quien designe al nuevo integrante del supremo tribunal del país Si bien al principio de la sesión los partidos coincidieron en que quien ocuparía la vacante sería una de las dos magistradas propuestas --Margarita Luna Ramos y Elvia Díaz de León, las divisiones comenzaron porque el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN) tenían candidatas distintas Una sesión de cuatro horas, en las que las mutuas acusaciones entre los partidos por no querer llegar a consensos, resultó infructuosa: al final, Luna Ramos obtuvo 72 votos, diez votos menos de los necesarios para lograr la mayoría calificada, Diaz de León 43 y De la Peza, seis Molesto, el senador Jesús Ortega llamó a las distintas fracciones a llegar a un acuerdo, con el fin de no enviar a la población el mensaje de que en el Congreso no hay capacidad de acuerdos En pocas palabras, llamó a los senadores a que no se "montaran en su macho" A su vez, el panista Diego Fernández de Cevallos, se quejó de la actitud priista y sostuvo: "Aquí no se ha dicho toda la verdad: el PRI no ha buscado consensos, sino adhesiones a su propuesta" Debido a que en la Constitución no se precisa el procedimiento para la elección de un ministro cuando se trate de una segunda terna, el presidente enviará otra propuesta, que de no ser aceptada, dejará la decisión en manos del Jefe del Ejecutivo