Jalapa, Ver (apro)- Ante el estancamiento del expediente relacionado con la muerte de la abogada veracruzana Digna Ochoa y Plácido, “ha perdido confianza en el trabajo que lleva a cabo la fiscal especial Margarita Guerra”, señalaron familiares de la defensora de derechos humanos para quienes sigue siendo imposible la hipótesis del suicidio, argumentado por los responsables de investigar los hechos ocurridos el 19 de octubre del 2001 Aun cuando hay otras líneas relacionadas con este crimen, perpetrado en la capital del país y que no han sido investigadas, señaló Ignacio Ochoa y Plácido, la Fiscalía Especial se ha encaminado hacia el suicidio, negándose a recibir más testimonios y pruebas que últimamente han ofrecido los abogados de la familia de Digna, situación que ha preocupado también a organismos civiles nacionales e internacionales Dada esta situación, el hermano menor de Digna Ochoa mencionó que los familiares no aceptarán que la fiscal Margarita Guerra concluya, al igual que lo hizo el subprocurador de la PGJDF, Renato Sales, que se trató de un suicidio, lo cual puede suceder, ya que hasta ahora se ha dedicado a investigar a la propia víctima sin abordar otras líneas La falta de seriedad de la PGJDF, que no termina por esclarecer el crimen y aprehender a los verdaderos responsables, ha provocado un desgaste físico, moral y económico a los integrantes de la familia Ochoa, que ahora requiere de 500 mil pesos para contratar a peritos profesionales para que realicen sus propias pesquisas Por ello, señaló que han tenido que recurrir al apoyo de la ciudadanía para cubrir esa cantidad Como presidente del Centro de Derechos Humanos “Digna Ochoa y Plácido”, junto con Luis González Acevedo y Teófilo Betancourt Gasca, en conferencia de prensa dio a conocer diversos casos de tortura ejecutada por elementos de la policía municipal de Misantla y agentes de la Policía Ministerial del Estado así como las irregularidades que prevalecen en el Cereso de esa localidad 27/05/03