México, D F, 28 de marzo (apro)- Uno de los libros de los que más se ha escrito en las últimas semanas en espacios periodísticos no especializados en el comentario bibliográfico, es el de Alejandra Lajous Vargas, AMLO: Entre la atracción y el temor Una crónica del 2003 al 2005 (México, Océano, 2006, 315 páginas) Como da la casualidad que he seguido el tratamiento de los medios informativos sobre la mayoría de los temas ahí abordados, leí el artículo del historiador Lorenzo Meyer sobre esa obra, "AMLO o la crónica de una polarización" (Reforma, 23 de marzo), antes de escribir este comentario Meyer cambió en algunos aspectos mi punto de vista, y para no repetir sus juicios ni rizar el rizo, lo tomo como el punto de vista amable sobre el libro Aun cuando la exposición de los hechos es precisa en el sentido de que nunca traiciona a sus fuentes, sigue un orden cronológico riguroso e interpreta mesuradamente las declaraciones y posturas de cada protagonista de su relato, esto no basta para que Alejandra Lajous lleve al lector a conformar una visión política Y me parece que la intención de ordenar una sucesión de hechos políticos y las distintas versiones sobre éstos tendría que conducir a ese punto, ya que no existe todavía suficiente perspectiva para fijar tendencias históricas sobre el asunto central del libro: la carrera política de Andrés Manuel López Obrador La autora afirma que no decidió que el libro tratara sobre el tabasqueño, sino que al emprender la crónica de la segunda mitad del sexenio foxista, la omnipresencia del hoy candidato presidencial lo convirtió en el eje obligado del relato Sin embargo, lo más aproximado a una conclusión es el título del libro, que no llega a cuajar como tesis porque no hubo un trabajo de análisis, de manera que a pesar de la abundante documentación manejada por Lajous y sus colaboradoras ?Lucía de Pablo y Dora Schael? parece, más bien, una semblanza extensa del exjefe de Gobierno del Distrito Federal, con sus contextos inmediatos Sin embargo, por una parte la cercanía de acontecimientos que todavía no se resuelven jurídica y políticamente y, por la otra, la lejanía ideológica de la autora respecto de los acontecimientos, provocan página tras página la sensación de que la materia del libro está por llegar Pero mucho antes de llegar al fin es evidente que todo el texto es un preámbulo ¿De qué? Uno sólo puede pensar que de algún acontecimiento externo al texto, tal vez la propia elección presidencial, quizá la propia definición de la autora respecto de su tema Cuando se trata de un recuento de acontecimientos cercanos, espero ubicar al narrador para comprender cabalmente su texto Como crónica, este libro me pareció carente de visión personal, sin que ello implicara objetividad, sino la constante búsqueda de interpretaciones generales e intermedias entre las opiniones polarizadas difundidas en los medios informativos No puedo negar que me interesaron ciertos pasajes, pero no por lo que escribió Lajous, sino por lo que decidió no investigar Por ejemplo, uno de los pasajes iniciales se refiere el movimiento de campesinos y pescadores tabasqueños que bloquearon diversas instalaciones de Pemex en 1996, encabezados por López Obrador: El que Pemex indemnizara mal y tarde, o que diera mantenimiento insuficiente a sus instalaciones, no provocaba dificultades en otras entidades, pero en Tabasco, donde López Obrador y el PRD local tenían capacidad para organizar a los pobres, la situación tendía a radicalizarse tanto como la magnitud del problema Para dimensionarlo, hay que reconocer que, para tender los 3 mil kilómetros de ductos que conducen gas y petróleo de los 900 pozos perforados en comunidades, ejidos y pequeñas propiedades a los centros de almacenamiento, Pemex tuvo que dragar ríos, rellenar lagunas y tapar pantanos Estas actividades generaron 500 mil barriles de petróleo diarios e importantes cambios demográficos ?que prácticamente no beneficiaron en nada a las comunidades marginales de Tabasco-- y nuevos problemas sociales También me intrigó su versión sucinta de la confusión que el gobierno federal trató de mantener en todo momento a partir de la captura de Carlos Ahumada en Cuba Acerca de ello hay muchas cosas que decir, pero me llama la atención que ni en este tema ni en el anterior la autora haya buscado agregar detalles, porque justamente esos pliegues de la información que falta extender a los ojos del público podrían cambiar radicalmente esa visión aplanada de los acontecimientos La cronista tenía fuentes de primera mano Cuando López Obrador bloqueó pozos y oficinas de Pemex, el director de la paraestatal era Adrián Lajous Vargas Y durante la crisis diplomática provocada por la detención y posterior deportación de Carlos Ahumada, la embajadora de México era Roberta Lajous Vargas, quien recientemente criticó, al unísono con Rosario Green ?la encargada de negociar el debate por Madrazo-- la muy criticable política exterior del gobierno foxista En la solapa se dice que Alejandra Lajous es historiadora de profesión y como cronista se le conocen al menos dos antecedentes: ¿Dónde se perdió el cambio? (2003), y la dirección de Las razones y las obras Gobierno de Miguel de la Madrid También es coautora con el expresidente De la Madrid del libro Cambio de rumbo Testimonio de una presidencia, 1982-1988 De 1990 a 2000 fue directora de Canal Once y actualmente "trabaja de forma independiente" Dentro de la abrumadora corriente de libros sobre el proceso electoral presente, este libro destaca sólo porque evita pronunciarse a favor o en contra de López Obrador Lo malo es que, después de tres centenares de páginas, un lector común como yo todavía no tiene elementos para formar su juicio y mucho menos para tomar una decisión Lo cual sería secundario si se tratara de una obra que trascendiera la coyuntura, pero no es así En todo caso, podría servir como un esquema para abordar en serio la descripción del "caos" político al que se refiere con insistencia la historiadora, pero entonces no podría caracterizarse con ese fácil sustantivo