Oaxaca, Oax , 11 de diciembre (apro)- El arzobispado de Antequera Oaxaca, negó que ejerza presión alguna contra el sacerdote indígena, Leoncio Hernández Guzmán, por sus "métodos de evangelización" y "su acompañamiento con el pueblo", y rechazó también la versión de que el párroco de Santiago Apoala haya renunciado a su ministerio sacerdotal En un comunicado firmado por el vicario general, Jesús Gopar Ricárdez; el secretario canciller, Francisco Reyes Ochoa, y el coordinador de la pastoral de la comunicación, José Guadalupe Barragán Oliva, el arzobispado desmintió así la versión difundida ayer por la coordinación de las Comunidades Eclesiales de Base Además, manifestó su preocupación por esta "información errónea" que han difundido terceras personas "sin el conocimiento objetivo del caso", situación que, dijo, ha propiciado confusión y daño a la iglesia diocesana y a su pastor, el arzobispo José Luis Chávez Botello Sin embargo, Apro obtuvo copia de un documento de las Comunidades Eclesiales de Base en el que se denuncia que el coordinador de dichas Comunidades, Leoncio Hernández Guzmán, renunció a su ministerio sacerdotal por "presiones" del arzobispo de Antequera Oaxaca, José Luis Chávez Botello, al reprenderlo por "su acompañamiento con el pueblo", lo que se ha visto reflejado en su abierta participación en las manifestaciones de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) El sacerdote indígena es uno de los 42 clérigos del presbiterio de la arquidiócesis de Antequera-Oaxaca, la Prelatura de Huautla de Jiménez y de la Diócesis de Puerto Escondido, que exigieron al entonces presidente Vicente Fox; a su secretario de Gobernación, Carlos Abascal, y al Congreso de la Unión, atender de inmediato la "ingobernabilidad que prevalece en el estado" En respuesta, la arquidiócesis rechazó la "supuesta presión que el Sr arzobispo está ejerciendo sobre el padre Leoncio Hernández Guzmán para que renuncie a su ministerio sacerdotal" Aclaró que "la realidad es totalmente diferente, ya que, ante una situación personal que el padre está viviendo, el arzobispo ha buscado acompañarlo exhortándole a superarla en la reflexión, oración y discernimiento evangélico" En la misiva se afirma que "la verdad radica en que ni el mismo padre Leoncio ha presentado renuncia alguna, ni en ningún momento el arzobispo se la ha pedido" Finalmente, se llama a los fieles a "no dejarse llevar por estas informaciones erróneas Más bien les pedimos que sigan orando por sus sacerdotes que tanto los necesitamos para ser fieles al ministerio que se nos ha encomendado y libremente aceptamos"