MONTERREY, N.L., 4 de noviembre.- El activista y dirigente de colonos, Héctor Camero Haro, fue sentenciado ayer a dos años y medio de prisión, acusado de operar sin permiso la radio comunitaria Tierra y Libertad, tomada en 2008 por agentes de la Policía Federal (PF).
    Además, Camero Haro deberá pagar una multa de 15 mil pesos.
          Tras conocerse la sentencia, la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) afirmó que el proceso que se siguió a Camero estuvo plagado de irregularidades, y señaló que la toma de las instalaciones de la radiodifusora se hizo sin una orden judicial.
    En un principio, Camero, también dirigente de la asociación Tierra y Libertad, fue llamado a declarar en calidad de testigo. Sin embargo, luego un agente del Ministerio Público consignó el expediente y lo señaló como culpable.   
          El juez V de Distrito en materia penal en el estado encontró a Camero responsable de uso, aprovechamiento y explotación del espectro radioeléctrico sin autorización, con lo que presuntamente violó el artículo 150 de la Ley Federal de Bienes Nacionales.
En un comunicado, la AMARC y su capítulo México condenaron la decisión del juez y advirtieron que impugnarán la sentencia.
En los años setentas del siglo pasado, Camero Haro militó en la organización Línea de Masas junto con Alberto Anaya, actual dirigente del Partido del Trabajo (PT).
Ambos fundaron la colonia precarista Tierra y Libertad, ubicada al norte de Monterrey, cerca del cerro del Topochico.
Sin embargo, mientras Anaya participaba en los trabajos para la fundación del PT, Camero Haro permaneció en la colonia Tierra y Libertad, donde mantiene una asociación civil dedicada a asesoría laboral y, hasta la toma de las instalaciones, la estación de radio Tierra y Libertad.
 En esta radiodifusora se daba consejos en materia laboral a obreros, albañiles y trabajadoras domésticas que viven en la zona norte de Monterrey.
 En 2002, Radio Tierra y Libertad tramitó su permiso, pero fue hasta 2009 cuando se le otorgó. Entonces, ya estaba fuera del aire, y su transmisor y antena, asegurados por la Policía Federal.