VILLAHERMOSA, Tab., 15 de abril (apro).- Junto con la ola de despidos en varios municipios, el gobierno del estado alista el despido de miles de burócratas, denunció el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la entidad.
Sin embargo, para el gobierno estatal que encabeza el priista Andrés Granier Melo se trata de medidas “históricas” de austeridad para resolver problemas acumulados a lo largo de varias administraciones y que, de no asumirse, “podrían poner en riesgo la estabilidad financiera y presupuestal del estado”.
    En un comunicado oficial, se advierte que “las medidas que se anunciarán a más tardar el próximo 4 de mayo son producto de un esfuerzo profesional, que garantizará optimizar el funcionamiento de la estructura gubernamental, así como el cumplimiento del compromiso de transformar Tabasco, a pesar de los problemas y retos inéditos que hemos tenido que enfrentar desde 2007”.
    “Se trata de medidas que beneficiarán al estado en el corto y largo plazos, decisiones indispensables e impostergables que se van a tomar con absoluta responsabilidad y extremo cuidado para alcanzar el propósito de hacer más eficiente y menos oneroso el trabajo administrativo, en concordancia con una demanda legítima y reiterada de la sociedad: hacer más con menos”, precisó.
     En ese marco, los esfuerzos que hoy se hacen deberán reflejarse en una administración estatal “más eficiente, austera y funcional que nos permita consolidar el proceso de transformación emprendido en 2007, una aspiración que es patrimonio de todos los tabasqueños, independientemente de filiaciones políticas”, manifestó el gobierno estatal.
Las nuevas acciones “históricas” de austeridad que, según la oposición prevén el despido de más de 5 mil burócratas estatales, se sumarán a la ocho medidas aplicadas desde noviembre del año pasado para frenar gastos onerosos a la administración estatal.
    Entre ellas, la desaparición del famoso “bono de fatiga”, prestación que disfrutaban funcionarios y distintos niveles de la burocracia estatal, lo que implicaba una derrama mensual de más de 50 millones de pesos, así como la cancelación del programa social “Te da más”, de apoyo a madres solteras, ancianos y discapacitados.
También la fusión o desaparición de dependencias públicas y la venta de aeronaves y propiedades del gobierno.
    Además, la reducción de gastos en arrendamientos, suspensión de gastos para pagos por honorarios; activación de un programa de retiro voluntario para los burócratas, y la reducción del horario de trabajo para todas las dependencias con un horario de ocho de la mañana a cinco de la tarde, con una hora para tomar los alimentos.
    De todas estas acciones, sólo el retiro voluntario de burócratas no ha sido activado.
    De acuerdo al coordinador parlamentario del PRD, Juan José Martínez, las nuevas medidas “históricas” que se anunciarán el 4 de mayo incluyen “echar a la calle” a más de 5 mil burócratas lo que, advirtió, podría crear “un peligroso conflicto social”, ya que la iniciativa privada no tiene capacidad para generar tal cantidad de empleos.
    Por su lado, en varios municipios continúa el masivo despido de trabajadores.
    El alcalde perredista de Jalapa, Luis Francisco Deyá, dijo que en su administración hay 600 trabajadores que se la pasan “sentados” porque no hay dónde ponerlos a laborar.
Informó que la pasada gestión priista le “heredó” más de mil 100 burócratas, pero sólo menos de la mitad tienen algo qué hacer, por lo que los 600 restantes “tendrán que ser dados de baja”, adelantó.
Por su parte el edil priista de Comalcalco, Alejandro Medina Custodio, adelantó que despedirá a 200 trabajadores porque la pasada administración perredista le heredó una plantilla de mil trabajadores.
    El presidente priista de Cárdenas, Nelson Pérez, dijo que recibió de la pasada gestión perredista “un ayuntamiento endeudado, desmantelado, sin maquinaria y con una nómina infladísima de más de 2 mil 500 empleados, lo que trae problemas financieros”.
A su vez, el presidente municipal priista de Teapa, Raúl Cabrera Pascacio, dio a conocer que en enero pasado hubo un recorte de 60 trabajadores, y que no se descartan otros despidos.