JALAPA, Ver., 19 de julio (apro).- Empleadas del Instituto Electoral Veracruzano (IEV) denunciaron ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) presuntas acciones de chantaje y acoso sexual de que fueron objeto a través de cámaras de video colocadas en el área de sanitarios del organismo y que luego fueron subidas a Internet.
Las cámaras de video habrían sido colocadas en la parte baja de los sanitarios de mujeres, donde las empleadas eran grabadas de manera subrepticia y, pese a que los hechos fueron denunciados ante la propia presidenta del Consejo General del IEV, Carolina Viveros García, éstos no fueron investigados.
“Las empleadas eran espiadas a través de cámaras de video y luego esas grabaciones se subieron a Internet”, señaló el representante del PRD ante el Consejo General del IEV, Freddy Marcos, quien se reservó el nombre de las trabajadoras que fueron víctimas de esas prácticas.
Ante el silencio de las autoridades del IEV, las empleadas acudieron a denunciar los hechos ante la PGJE, señalando a tres de sus compañeros que laboran en el departamento de Contraloría Interna como los presuntos responsables del acoso.
Según versiones extraoficiales, la semana pasada las mujeres del área de la Contraloría Interna tuvieron acceso a un dispositivo de almacenamiento de información (USB) donde se guardaron esas grabaciones realizadas de manera ilegal.
En la USB se guardaban las imágenes de la cámara instalada en la parte baja de los sanitarios y ésta tenía conexión directa con el equipo de cómputo del IEV, por lo que las presuntas víctimas acudieron a presentar la denuncia ante la PGJE por violación a su intimidad, refirió el perredista.
A las instalaciones del IEV se presentó personal de Servicios Periciales de la PGJE y, al parecer, confisco el equipo de cómputo y material que comprobaba el delito denunciado por tres trabajadoras del organismo electoral.
Fuentes del mismo organismo revelaron que este asunto estarían implicados tres empleados del área de la Contraloría Interna, quienes fueron despedidos por la propia presidenta consejera del IEV, Carolina Viveros.
También se informó que las cámaras de video estaban colocadas debajo de los sanitarios para poder grabar las partes íntimas de las mujeres, imágenes que fueron editadas y subidas a la red.
El perredista consideró que la presidenta del IEV debe aclarar esta situación para no afectar aún más la imagen del órgano electoral, ya que se sabe de videos donde trabajadores sostienen relaciones con empleadas del propio instituto y se están utilizando como medida de chantaje para que se desistan de la denuncia.
En este sentido, refirió tener conocimiento que el personal femenino de ese instituto está muy molesto por esta situación, por lo que están en su derecho de denunciar y exigir a la PGJE que proceda contra los responsables.

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