Desaprueban organizaciones civiles reforma constitucional en Oaxaca
OAXACA, Oax., 7 abr (apro).- El gobernador Gabino Cué se congratuló por la reforma constitucional que ayer aprobó la LXI Legislatura del Congreso local y que garantiza, entre otras cosas, la posibilidad de que los ciudadanos participen mediante referéndum en la revocación del mandato de sus gobernantes.
De acuerdo con Cué, con las modificaciones que se hicieron a la Constitución del estado, Oaxaca se pone a la vanguardia y se convierte de nueva cuenta en un referente de democracia e inclusión.
“Después de más de 89 años –desde 1922– no se había tenido una innovación de este calado, de esta envergadura, que habla del compromiso de todos por hacer que las alternancias se constituyan en verdaderas transiciones democráticas”, puntualizó.
Y recalcó: “No se puede tener una transición democrática sin un nuevo andamiaje institucional que permita una mejor colaboración entre los poderes y una mayor autonomía”.
En conferencia de prensa en el salón Gobernadores de Palacio de Gobierno, flanqueado por los presidentes de la Junta Política de la Comisión Legislativa y del Tribunal Superior de Justicia, Martín Vásquez Villanueva y Alfredo Lagunas Rivera, respectivamente, el mandatario oaxaqueño agregó que “no se puede entender una transición democrática sin que los ciudadanos participen en decisiones trascendentes en la vida pública”.
E hizo hincapié en que con los acuerdos que se tomaron en el Congreso local queda demostrado que las alianzas son una opción, pues nosotros, como coalición, “planteamos la idea de transitar de un régimen que juzgamos cerrado –un régimen, hasta podría decirlo, autoritario– a un régimen más democrático”.
Eso habla de que en Oaxaca “sí estamos poniendo un ejemplo de que la pluralidad no es obstáculo para hacer cambios con una visión de Estado”, remató.
No obstante, la organización civil Servicios para una Educación Alternativa (EDUCA) consideró que la iniciativa que presentó Gabino Cué el 1 de diciembre pasado, al tomar posesión del cargo, “no refleja” el cambio democrático que demanda el pueblo de Oaxaca.
Según EDUCA, a cuatro meses del nuevo gobierno, proveniente de una elección altamente participativa, observan con desconcierto que las viejas prácticas de hacer política y de legislar continúan vigentes.
Y es que los contenidos de la reforma, afirmó, quedaron supeditados una vez más a los acuerdos partidistas, en los que se privilegiaron los intereses políticos sobre las demandas de la ciudadanía.
“Con ello queda de manifiesto que lo que se vive en Oaxaca es sólo una alternancia política y no los cambios profundos que requiere una verdadera transición democrática”, añadió.
La organización civil cuestionó algunos aspectos de la reforma constitucional, en particular los referidos a mecanismos de democracia directa, cuya aplicación –apuntó– resulta inaccesible e inoperante a la ciudadanía, pues los porcentajes que se establecen para que puedan ser solicitados son muy elevados (20% de la lista nominal para iniciar el plebiscito), de manera que con ello se convierten en “instrumentos de papel” que jamás podrán hacerse realidad.
Además, dijo, resulta contradictorio que mientras en el Plan Estatal de Desarrollo los pueblos indígenas son un eje central, éste no tiene ninguna relevancia en la reforma aprobada ayer.
“Una vez más los derechos de los pueblos indígenas quedarán relegados a un lugar secundario en la legislación oaxaqueña, que además no garantiza condiciones de igualdad para la participación política de las mujeres”, asestó.
Entre los temas ausentes mencionó la reforma municipal, el reconocimiento al cuarto ámbito de gobierno, la reforma política, las candidaturas ciudadanas, el acceso a la justicia para los pueblos indígenas y las cuotas de género.
En contraposición con Educa, Iniciativa Ciudadana Oaxaca y el Centro de Derechos Humanos “Bartolomé Carrasco” se manifestaron complacidos con la reformas, en virtud de que, apuntaron, se elimina el actual organismo defensor de los derechos humanos y se crea la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca.
Lo relevante, agregaron, es que el nuevo organismo podrá proponer acciones para la eliminación de toda forma de discriminación y exclusión entre la sociedad oaxaqueña, además de que tendrá competencia para conocer violaciones a derechos humanos de sujetos colectivos y podrá intervenir, como mediador profesional, imparcial y neutral, en procesos de negociación para resolver conflictos sociales.
Y no sólo eso, también vigilará el cumplimiento total de las determinaciones formuladas por los organismos nacionales e internacionales de los derechos humanos.