VILLAHERMOSA, Tab. (apro).- El gobernador Andrés Granier Melo presumió hoy que tres delitos de “alto impacto” han disminuido en Tabasco, sin embargo, el presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJE), Rodolfo Campos Montejo, lamentó que cada día más jóvenes se dediquen al secuestro y la extorsión en la entidad. Granier Melo sostuvo que, según datos del Consejo Nacional de Seguridad Pública (CNSP), ilícitos como el secuestro, extorsiones y homicidios han bajado 31, 21 y 12%, respectivamente, producto “del firme combate a la delincuencia”. El mandatario estatal resaltó que, gracias al esfuerzo, entrega y lealtad de los cuerpos policiacos del estado, así como al apoyo permanente de las fuerzas federales, Tabasco pudo bajar sus índices en estos delitos de “alto impacto”, con lo que ratifica su compromiso de seguir combatiendo al crimen organizado. También insistió en que no permitirá que los grupos delincuenciales se apoderen de Tabasco. “Continuaremos esta batalla, porque también es un compromiso con quienes han caído en esta lucha, pues es una forma de dejar claro que su sacrificio no fue en vano y que su memoria está presente en todo momento”, enfatizó durante un homenaje a 16 policías ministeriales muertos en el cumplimiento de su deber. Destacó que en Tabasco se han asestado duros golpes y desmantelamiento de bandas delictivas, como la reciente captura de siete presuntos miembros de Los Zetas, dedicados al secuestro, ejecuciones, extorsiones y tráfico ilegal de combustible y drogas, con redes de operación en Guatemala y Colombia. Adelantó que apenas en la madrugada de este viernes 3 se asestó otro duro golpe a un grupo delictivo que operaba en Tabasco y sobre el que se darán mayores detalles en los siguientes días. En sentido contrario a lo destacado por Granier Melo, el presidente del TSJE, Rodolfo Campos Montejo, aseguró que cada día son más los jóvenes que se suman a cometer delitos como secuestro, extorsión y contra la salud, al ser presa fácil de la delincuencia organizada. Calificó la situación de “alarmante”, sin detallar cifras. “No nos queda de otra más que enfrentar este tipo de asuntos, que se han venido dando con bastante frecuencia”, expresó. Campos Montejo mencionó que la desintegración familiar, el desempleo y la falta de oportunidades son el caldo de cultivo para que los jóvenes se vean atraídos por engrosar las filas de las bandas delictivas.