TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- Trabajadores del Consejo Estatal de Derechos Humanos (CEDH) realizaron un paro de actividades en protesta porque el consejero Florencio Madariaga Granados se niega a dejar la presidencia del organismo, pese a que fue destituido desde la semana pasada. Los poco más de 50 empleados se apostaron en el acceso principal del CEDH desde temprana hora para impedir que Madariaga Granados ingresara al inmueble. Madariaga Granados se ha negado a aceptar que fue removido del cargo por sus compañeros, quienes nombraron al consejero indígena Lorenzo López Méndez en su lugar. Selene Moela, vocera del recién creado Sindicato de Trabajadores del CEDH, denunció que “desde el Palacio de Gobierno”, el gobernador Manuel Velasco y el PRI pretenden imponer a Madariaga Granados como ombudsman del estado. Aseguró que Madariaga pertenece al grupo político del exgobernador Roberto Albores Guillén, cuyo hijo Roberto Albores Gleason es presidente estatal del PRI. Desde hace cuatro meses que fue nombrado consejero Madariaga Granados hizo que lo designaran presidente del CEDH. Sin embargo, su proceder generó divisiones dentro del Consejo. Los consejeros se dividieron, por un lado Pedro Raúl López Hernández, Rafael Navas y Lorenzo López Méndez, así como el secretario ejecutivo, Diego Cadenas Gordillo, extitular del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, se oponen a Madariaga. En tanto, Madariaga sólo cuenta con el apoyo de la consejera Marian Patricia Jiménez, también exfundadora del Frayba. Los trabajadores refrendaron hoy su apoyo a Lorenzo López Méndez, con quien firmaron una minuta de reconocimiento mutuo para poder levantar el paro de labores, lo que fue calificado como un logro para los sindicalistas porque hasta ahora no se les había reconocido legalmente. Los sindicalistas advirtieron que si Madariaga Granados insiste en ostentarse como consejero presidente, volverán a tomar las instalaciones para protestar en su contra.