CUERNAVACA, Mor. (apro).- El gobierno estatal reconoció un incremento en el número de secuestros de 80%, al contabilizar 135 en menos de un año. La vocera del gabinete de seguridad, Jacaranda Mojica, hizo público un informe parcial de la situación que enfrenta la administración del gobernador perredista Graco Ramírez en el delito de secuestro, en el que se negó a aceptar que Morelos ocupa el primer lugar nacional. Primero, informó que en lo que va del sexenio la Fiscalía morelense contabilizó 135 denuncias por el delito de secuestro, pero sólo fueron liberadas 115 personas. De las 20 víctimas restantes dijo desconocer si fueron asesinadas o aún se encuentran en cautiverio. Las estadísticas que presentó indican que el gobierno de Graco detuvo en 11 meses a 42 células delictivas que operaban, principalmente, en los municipios de Cuernavaca, Jiutepec, Puente de Ixtla, Temixco, Cuautla, Tlaltizapan y Tlaquiltenango. Pero también realizaron plagios en Puebla y el Estado de México. Públicamente, la vocera dijo desconocer el número global de presuntos secuestradores detenidos en la actual administración local o cuántos plagios realizaron. Tampoco presentó una estadística de los vinculados a proceso, a la postre liberados de cargos. Además, aceptó no conocer el número oficial de sentenciados. Prometió documentarse para en otro momento informar a los reporteros. Antes, aseguró que las policías, ayudadas por el Ejército, reiniciarán la búsqueda del exedil priista Víctor Tapia Ocampo. El expresidente de Tetecala de la Reforma fue sacado de su casa por un comando y a la fecha sigue desaparecido. Jacaranda Mojica informó que la familia nunca recibió una petición de un rescate de sus captores, por lo que se puede descartar el delito de secuestro. Recordó que el sábado pasado uno de tres detenidos por robo de auto y posesión de mariguana confesó haber participado en la desaparición del político. A pesar de que el detenido declaró ministerialmente que Víctor Tapia había sido asesinado y enterrado, las autoridades no lo han encontrado. Detalló que han realizado inspecciones en lugares de muy difícil acceso. Incluso, tienen identificada una zona donde pudo haber sido asesinado. Sin embargo, aclaró que el gobierno sigue investigando y no puede darse por muerto al priista.