Muerte de estudiante enfrenta a autoridades de Guanajuato y Jalisco
GUANAJUATO, Gto. (apro).- El rector de la Universidad de Guadalajara, Tonatiuh Bravo Padilla, exigió al gobernador de Guanajuato, Miguel Márquez Márquez, el esclarecimiento del asesinato, el pasado 18 de octubre, del estudiante de ingeniería en mecatrónica, Ricardo de Jesús Esparza Villegas.
En un desplegado publicado en diarios el rector exigió una “inmediata y profunda investigación de los acontecimientos y que se castigue con todo el rigor de la ley a los responsables”. Además indicó que ya solicitó el apoyo del Gobierno de Jalisco, a través de la Secretaría General de Gobierno.
“Esta casa de estudio muestra su indignación por la muerte del joven estudiante, se solidariza con su familia y exige que se imparta justicia y prevalezca el Estado de Derecho”, señala el desplegado.
Aparte, en entrevista con Noticias MVS primera emisión, criticó que en el caso del asesinato del estudiante de 18 años de edad se vuelva a configurar el patrón de que la responsabilidad es presuntamente de policías.
"Son hechos muy lamentables, vuelven a configurar el patrón de que el ciudadano en manos de la policía es donde más inseguro está, donde más incierto es su paradero", lamentó.
En Jalisco, dijo, hay un clima de indignación y el martes compañeros de Ricardo ya iniciaron actos de protesta.
"Los jóvenes tienen la expectativa de que su vida llegue en un estado de Derecho, y lo que ven es que ese estado de Derecho no existe o está a medias o está descomponiéndose. Es una aspiración mínima que debe tener cualquier ciudadano, de tener los mínimos fundamentos de certidumbre, la vida es el derecho fundamental",, subrayó el rector de la UdeG.
De acuerdo con el relato de compañeros de Ricardo de Jesús, quienes llegaron el pasado viernes 17 de octubre a Guanajuato para asistir al Festival Cervantino, el estudiante de mecatrónica fue detenido por policías, lo buscaron en todas las agencias del Ministerio Público y en las diferentes corporaciones policiacas pero nunca lo hallaron.
Según el rector de la UdeG, un testigo vio el momento en que los policías se llevaban al estudiante, aunque no supo identificar de qué corporación eran.
La mañana del domingo 19, Ricardo fue hallado muerto en el patio de la vivienda ubicada en Peña Grande número 28, una casa ubicada sobre unos peñascos. La propietaria del inmueble llamó al 066 para informar del hallazgo.
"En uno de los periódicos locales de Guanajuato se maneja que él andaba asaltando casas, y que al intentar asaltar una casa cayó de una azotea, francamente es una versión que nadie de los estudiantes cree que sea cierta", sostuvo Bravo Padilla.
Sobre el caso el gobierno de Guanajuato emitió un comunicado en el que señala que instruyó a la Procuraduría de Justicia acelerar las investigaciones y llegar a las últimas consecuencias en el caso del estudiante.
"Actuaremos con determinación hasta llegar al esclarecimiento de los hechos", prometió Márquez Márquez.
El mandatario precisó que la Procuraduría, a través de la Unidad Especializada en homicidios, asumió la investigación y trabaja “de manera estrecha” con la familia, amigos y Procuraduría de Jalisco.
Cerca del Pípila
Una vivienda sin ‘enjarrar’ rentada por estudiantes, a mitad de un empinado callejón y alejado de la zona centro, localizada entre el Paseo de la Presa y la carretera Panorámica --cerca del monumento al Pípila--, fue el escenario de la muerte del estudiante jalisciense Ricardo de Jesús Esparza Villegas, alumno de la licenciatura en Mecatrónica de la Universidad de Guadalajara en el Campus de Lagos de Moreno.
Una probable caída desde unos siete metros de altura –el equivalente a los dos pisos de la vivienda--, que ocasionó un traumatismo cráneo-encefálico es, hasta ahora, la única causa probable de la muerte de Ricardo de Jesús, quien había viajado con un grupo de amigos desde Lagos hasta esta ciudad para disfrutar del ambiente del Festival Internacional Cervantino (FIC).
Sin embargo, entre su arribo a la ciudad, el viernes 17 por la tarde, y el hallazgo de su cuerpo, alrededor de las diez de la mañana del domingo 19, permanece hasta ahora la incógnita, de acuerdo con la versión de las autoridades responsables de indagar esta línea del tiempo hasta saber cómo llegó el joven hasta el callejón de Peña Grande y quedó tirado, su cuerpo torcido, en el patio de piedra de la casa marcada con el número 28.
El callejón de Peña Grande inicia en la carretera Panorámica, desde donde se descienden alrededor de 70 escalones para llegar a la casa. En medio del patio interior, tras un muro de ladrillos y un portón negro, una de las estudiantes que ahí viven encontró tirado al muchacho, según el reporte de Seguridad Pública Municipal y del Ministerio Público.
Los vecinos aseguran que este es un callejón “muy tranquilo, donde nunca ha pasado nada grave” y, además, donde rara vez se ve a la Policía Municipal. Al menos hasta ahora.
Aunque durante el tiempo en que dura el Cervantino la vigilancia de la ciudad corre a cargo de varias corporaciones, siempre participan la Preventiva y las fuerzas de seguridad pública del estado y, eventualmente se incorporan preventivos de municipios vecinos.
Este año, además, participan elementos de la nueva Gendarmería Nacional.
No obstante, en Lagos de Moreno el catedrático Roberto Castelán habló así durante el paro solidario de alumnos por los normalistas desaparecidos en Ayotzinapa, al mencionar específicamente el caso del estudiante fallecido en Guanajuato:
“Ricardo de Jesús era un alumno de noveno semestre de la licenciatura en Mecatrónica. Un día se pone de acuerdo con sus amigos y se van a Guanajuato, al Festival Internacional Cervantino. Ricardo no regresó con sus amigos. Lo asesinaron en Guanajuato, y lo asesinó la policía de Guanajuato. Quienes tienen que cuidar a nuestros jóvenes, a nuestra sociedad, a nuestras familias, se convirtieron en los verdugos de nuestros jóvenes, de nuestros hermanos, de nuestros compañeros, y eso no tenemos que permitirlo”.
Mientras autoridades de la UdeG y del Centro universitario de Lagos (Culagos) exigen al gobierno de Guanajuato esclarecer la muerte de Ricardo, esta tarde el procurador Carlos Zamarripa Aguirre dio a conocer que hasta el momento no ha sido posible recabar las declaraciones formales de los jóvenes con quienes Ricardo viajó a Guanajuato, mismas que calificó de “imprescindibles y muy importantes” para la investigación.
“Los familiares supieron por la novia que Ricardo había viajado a Guanajuato con algunos amigos, pero desconocían con quiénes. Hemos permanecido en Jalisco contactando a los amigos para obtener el testimonio de ellos, de los que andaban con Ricardo, porque son los que nos van a dar una información muy valiosa para indagar ante las circunstancias que nos vayan a aportar. Ayer quedamos con las autoridades de la universidad de que los íbamos a poder entrevistar; dijeron que estaban en Guadalajara, luego que en Lagos, luego que en Zapopan”.
También dijo tener información de que un joven de nombre Daniel comentó que policías habían abordado o detenido a Ricardo. “Pero no sabemos bajo qué circunstancias porque no conocemos su testimonio. Hoy las autoridades de Jalisco se comprometieron a traerlas a Guanajuato para que declaren, porque estas declaraciones nosotros no las hemos podido tener”, insistió.
Zamarripa Aguirre dijo que ya se tienen las entrevistas con las estudiantes que ocupan la casa y la mayoría de los vecinos.
“Tenemos varios testimonios de que se vio a cuatro jóvenes por el callejón, pero es todo lo que tenemos. Personas que tienen tiendas de abarrotes en el lugar nos han referido eso. Tenemos videos de los lugares cercanos, desde el viernes al día de hoy, ya asegurados, pero nos siguen faltando los testimonios de los amigos con los que andaba. Espero que la autoridad universitaria nos proporcione los datos de los estudiantes, porque hasta ahorita sólo nos ha dado nombre de pila de uno de ellos. Los padres no saben con qué amigos se fue, la novia sólo dice que andaba con amigos, qué bueno que el rector sí sabe quiénes son”, concluyó.
Esta misma tarde, personal de Servicios Periciales de la PGJE acudió nuevamente al domicilio, donde permaneció por varias horas ampliando la revisión del lugar.