MONTERREY, N.L. (apro).- El secretario de Seguridad de Cadereyta, general Ricardo César Niño Villarreal, presentó su renuncia al cargo luego de que un grupo de uniformados municipales prestó sus armas a estudiantes para que se fotografiaran con ellas. En un comunicado difundido este martes, el ayuntamiento de Cadereyta, municipio ubicado 30 kilómetros al oriente de la capital, informó que el alcalde José Emeterio Arizpe Tellez recibió la renuncia del militar. El pasado miércoles 12, un grupo de elementos de la Unidad de Reacción arribó a la secundaria 61 “Sergio Montalvo Garza”, en la comunidad La Tinaja, del municipio de Santiago, para atender el robo del celular de la hija de la secretaria de Desarrollo Social de Cadereyta, Nelly Fuentes. Supuestamente la funcionaria acudió a la escuela para dar una plática de valores, pero lo hizo acompañada de su hija. Al finalizar el evento, los agentes prestaron a los alumnos sus fusiles de cargo para que se tomaran fotografías. Algunos de ellos subieron las imágenes a las redes sociales, lo que provocó un reproche generalizado de la comunidad de Cadereyta y la renuncia de Niño Villarreal. “El general Niño Villarreal asumió la responsabilidad de los policías, ya que son elementos a su cargo, y su sentido de responsabilidad lo obliga a tomar esta difícil pero, para él, necesaria decisión”, se lee en el comunicado. En el mismo texto, el ayuntamiento reconoció la labor del general en los casi dos años que permaneció en el cargo, y precisó que los policías que cedieron sus armas fueron suspendidos sin goce de sueldo. “Durante el tiempo que el militar estuvo al frente de nuestra Secretaría de Seguridad, se logró una significativa disminución en los índices delictivos en nuestra comunidad. El presidente municipal, a nombre de toda la población de Cadereyta, externa su profundo agradecimiento al general Niño Villarreal por la notable mejoría en el combate a la delincuencia, gracias a su gran vocación de servicio”, puntualizó.