PUEBLA, Pue. (apro).- Molestos porque no les permitieron linchar a dos supuestos ladrones, unos 300 habitantes del municipio de Altepexi, localizado al sureste de Puebla, quemaron anoche una camioneta y saquearon un negocio del alcalde Lorenzo Reyes Mariano, además de destruir una patrulla y una cantina. Este intento de linchamiento se suma otros 21 que se han registrado en el último año en la entidad, el más reciente ocurrido el 27 de septiembre en la población de Cohuecán, ubicada en la zona centro del estado, donde una muchedumbre torturó, macheteó y colgó a dos presuntos secuestradores. No es el primer caso de linchamiento ocurrido recientemente en esa localidad. El 1 de septiembre de 2014 los lugareños asesinaron a un joven de 18 años que atraparon cuando pretendía robar una camioneta cargada con fertilizante. En el caso de Altepexi, los habitantes argumentaron estar cansados de la inseguridad que priva en la región, razón por la que pretendían hacer justicia por su propia mano para dar un escarmiento a los delincuentes. Según el reporte policiaco, los sujetos fueron acusados de haber golpeado a un habitante de esa comunidad para tratar de robarle una motocicleta; acto seguido fueron detenidos y entregados a los uniformados por la propia población. Sin embargo, los residentes tomaron luego la decisión de darles un “escarmiento” a los presuntos delincuentes, por lo que regresaron a las oficinas de la policía municipal, pero éstos ya habían sido trasladados a Tehuacán. Esto generó el enojo de los habitantes, que decidieron tocar las campanas para congregar al resto de la población, y fue cuando iniciaron los disturbios que se extendieron hasta los primeros minutos de este martes. Los pobladores acudieron a las oficinas del edil Lorenzo Reyes Mariano para hacerle un reclamo por la creciente inseguridad, pero éste se negó a recibir a la turba, lo que agravó aún más el enojo y fue entonces cuando empezaron a causar destrozos. Primero soldaron la entrada principal de la presidencia, luego arremetieron contra las propiedades del alcalde, entre ellas una camioneta Escape que fue quemada; además fueron a una mueblería propiedad del edil, donde sustrajeron muebles. También quemaron el bar “Los Rosales”, donde trabajaba uno de los supuestos responsables del intento de robo, y prendieron fuego a una patrulla municipal. Además de estos casos, en los últimos meses se han presentado intentos de linchamiento en otros municipios como Tehuacán, San Martín Texmelucan, Tlacotepec de Benito Juárez, Cañada Morelos, Tlatlauquitepec, Nicolás Bravo, Zinacatepec, Ixcamilpa, Huixcolotla, Huauchinango, Tepeojuma, Teziutlán, Ajalpan, Amozoc, Venustiano Carranza, Libres y Vicente Guerrero. El 17 de septiembre anterior, pobladores de Tlacotepec de Benito Juárez trataron de linchar a tres policías municipales a los que acusaban de proteger a un sujeto que atropelló y causó la muerte de un niño. Otro caso grave ocurrió el 5 de enero, cuando habitantes del fraccionamiento La Cantera de Tehuacán mataron a una persona y dejaron mal heridos a dos más que fueron descubiertos cuando robaban en el interior de una casa.