La PGJ continúa sin identificar calibre de arma utilizada en homicidio de menor

miércoles, 22 de julio de 2015 · 14:26
MÉXICO, D.F., (apro).- La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Michoacán informó que hasta ahora no se ha podido identificar el calibre de las armas utilizadas en el ataque del pasado domingo en el puente de Ixtapilla, perteneciente al municipio de Aquila, que cobró la vida de Edilberto Reyes García, de 12 años de edad, y por tanto no se sabe de dónde vino el disparo. “Desgraciadamente se determina que hay dos heridas en el cuerpo del niño. La esquirla que entra no tiene salida y es muy pequeña. Es imposible determinar el calibre del arma”, puntualizó el procurador de Justicia del estado, Jaime Rodríguez. "Estamos investigando en este momento, sin lugar a duda es un homicidio, alguien evidentemente accionó un arma de fuego y como resultado muere este niño. Pero no es directa la bala que le cobra la vida, es una esquirla, que quede claro, pero eso no quiere decir que no haya un responsable. Se trata de saber quién accionó el arma, qué tipo de arma era", añadió en entrevista con Radio Fórmula. Según el funcionario federal, la única bala completa se encuentra alojada en el glúteo del joven Delfino Alejo, de 17 años, quien resultó lesionado durante el ataque junto con otras tres personas, entre ellas una menor de seis años, pero hasta ahora, insistió, no se sabe quién accionó el arma. De acuerdo con el testimonio de un poblador de la comunidad de Ostula, municipio de Aquila, la manifestación del domingo 19 para exigir la liberación del exdirigente de las autodefensas Semeí Verdía fue pacífica y con bloqueos carreteros. Explicó que las manifestaciones se hicieron en tres puntos de ese municipio, mismos que comunican a Colima con el Puerto de Lázaro Cárdenas, hasta donde llegaron los militares y policías estatales para diluir las manifestaciones. “Nosotros en ningún momento utilizamos la violencia, nunca lo hicimos, solamente nos manifestábamos hombres, mujeres, ancianos, toda la comunidad y demás personas que acudieron a estos puntos, inclusive habitantes de otros municipios”, subrayó. Sin embargo, dijo, en el primero de los tres puntos que habían instalado sobre la carretera costera, los soldados y policías les echaron encima los pesados vehículos. “Con lujo de violencia las autoridades nos echaron encima las tanquetas blindadas, aventando hacia los lados los vehículos que ahí teníamos, no los chocaron, no les importó que hubiera civiles, ancianos, niños, no les importó que hubiera mujeres, y aun así nos los echaron encima”, describió el joven. En el segundo punto del poblado del Duin –añadió– disparaban los cartuchos de gases lacrimógenos en la cara de las personas; ahí hirieron a varios de sus compañeros que caían al suelo con el impacto de los proyectiles. Según el joven, de quien se omitió el nombre por seguridad, todo parecía que nada le importaba al convoy militar-policial, incluso a costas de pasar por encima literalmente de todos los manifestantes. Reveló que al menos cinco habitantes más resultaron lesionados por los impactos de las cápsulas de acero de los gases lacrimógenos y una cantidad indeterminada de golpeados por los elementos del Ejército, que tuvieron que ser atendidos por ellos mismos. Sobre las aseveraciones del Grupo de Coordinación Michoacán, negó contundente que cualquiera de los habitantes hubiera lanzado o portado siquiera gases lacrimógenos, como lo señaló Felipe Gurrola, comisionado federal para los trabajos de seguridad. El testigo de lo ocurrido detalló que algo muy similar ocurrió en el tercer bloqueo, solo que ahí, a las afueras de Ixtapilla, los disparos en contra de la población marcaron la diferencia. Ahí la manifestación se tuvo que dispersar porque ya no solo eran gases lacrimógenos, el Ejército Mexicano estaba disparando con sus fusiles en contra de la población civil, donde hirieron a varios compañeros, entre ellos un niño y una niña, apuntó. Dos videos publicados ayer en YouTube muestran presuntamente los momentos previos al tiroteo que se desató en la comunidad de Ixtapilla. El primero de ellos destaca la llegada de militares en un convoy al lugar en donde se desarrollaba una manifestación contra la captura de Semen Verdía, acusado de posesión de armas prohibidas, lo que presuntamente desencadenó el tiroteo. Varios soldados se confrontan verbal y físicamente con los civiles y muchos de ellos reclaman el motivo de la presencia del Ejército, al que acusan de atacar a la población. En tanto, los militares intentan retirar los objetos que obstruyen la carretera para el paso del convoy. “¡Tírale, tírale, pues!”, grita el hombre que hace la grabación, presuntamente ante las amenazas de disparos que hacían los soldados. “Son muy buenos con los civiles. A ver, ¿por qué no se enfrentan a los malandrines, a los mañosos?”, se escucha en el video. El otro video muestra al convoy del Ejército apostado en un puente —cerca de donde se desarrollaba la manifestación— desde donde inician los disparos. Aunque en un momento se escuchan cinco detonaciones de arma, y le sigue una ráfaga, no es claro el origen del tiroteo. Pero las personas que están cerca de quien hace la grabación, corren hacia una vivienda cercana a la carretera para resguardarse. El lunes por la tarde, el comisionado de seguridad en Michoacán, Felipe Gurrola, aseguró que los elementos del Ejército realizaron disparos al aire para “disuadir la situación”, por lo que en principio descartó que la acción hubiera generado la muerte del niño de 12 años. Al respecto, el gobernador electo en Michoacán, Silvano Aureoles, pidió ayer no descalificar por adelantado a las fuerzas armadas tras el ataque a civiles. Hasta el momento no hay evidencia de que sean elementos del Ejército los que hayan provocado la muerte de un niño de 12 años de edad, como consecuencia del enfrentamiento, dijo en entrevista con Grupo Imagen. "A mí me muestran algunas imágenes donde el proyectil que le causa daño al menor que perdió la vida, no es un proyectil de los que usan las fuerzas armadas, es de un calibre distinto, y un impacto de un proyectil de armas del Ejército hubiera causado un daño distinto", explicó exdiputado federal. Aureoles demandó que se realicen las investigaciones pertinentes para deslindar responsabilidades, antes de especular con supuestos que podrían poner en duda el servicio de los militares, sin evidencia probatoria. Verdía fue engañado para ser detenido, dice su madre Martha Rita Zepeda, madre de Semeí Verdía, el líder de autodefensas detenido, aseguró que el gobierno “está de la mano con el crimen organizado” y ya nadie confía en las autoridades. Además, denunció que su hijo fue engañado para ser aprehendido, ya que recibió una llamada del secretario de Gobierno en Michoacán, Jaime Esparza Cortina, quien lo citó para tener un encuentro. La muerte del niño de 12 años de edad, las lesiones de los otros tres habitantes, así como la detención de su hijo, solo son consecuencia de que “ahora es el gobierno en que se va dedicar a matar y a perseguir a los indígenas, como lo hacía el crimen organizado” antes de que los pueblos indígenas de esa región se levantaran en armas, precisó en entrevista con ‘Animal Político’. Asimismo, reveló que su hijo se fue dos años a Estados Unidos por las amenazas del crimen organizado y regresó para sumarse a la lucha civil armada, pero ahora está en prisión. “Así ya ni como confiar en las autoridades. Ya nos dimos cuenta que ya no tenemos a quién acudir, porque sabemos que el gobierno está de la mano con el crimen organizado a lo que estoy viendo el día de hoy”, acusó.

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