HERMOSILLO, Son. (apro).- Entre los muchos pendientes que la administración de Guillermo Padrés heredará a su sucesora, la priista Claudia Pavlovich, destaca la deuda a proveedores e instituciones públicas por un monto de 6 mil 200 millones de pesos, informó hoy el analista financiero Pedro Ángel Contreras López. El también director general del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados dijo al telenoticiero “Punto de Partida”, conducido por Denise Maerker, que este pasivo es adicional a la deuda pública de 22 mil 300 millones de pesos, reportada por la secretaría de Hacienda al cierre del primer trimestre de 2015. “Como ya hemos señalado durante las reuniones del equipo de transición sobre todo en la parte financiera: lo que debió subir bajó, y lo que debió bajar subió”, ejemplificó. Este desequilibrio financiero, expuso Contreras, significa que las participaciones federales de todo un año no alcanzarían para cubrir la deuda, por lo que están comprometidos el 130% de los ingresos enviados por la federación. “El secretario de Hacienda (Carlos Villalobos) reconoció en reunión pública que no hicieron la presupuestación del pago de aguinaldos para este año, de tal manera que hay un faltante de 740 millones de pesos, que la gobernadora electa tendrá que ver, como los puede conseguir o como puede hacer economías para pagar ese aguinaldo “, resaltó. Y precisó: “Son 14 mil trabajadores de la administración que no están presupuestados, sin contemplar los organismos descentralizados donde está el grueso del personal del estado y que tienen su propio presupuesto de egresos”. Según reportó el Instituto Superior de Auditoría y Fiscalización (ISAF) el gobierno de Padrés sobreejerció recursos públicos por una cantidad superior a los 12 mil 450 millones de pesos en 2014. En el Informe de Resultados a la revisión de la Cuenta Pública Estatal 2014, en poder de Apro, el ISAF detectó 3 mil 126 irregularidades, de las que mil 726 fueron solventadas y restan por justificar mil 295. El desorden financiero lo encabeza una “dependencia virtual” llamada Deuda Pública que se sobregiró 7 mil 588 pesos, toda vez que su presupuesto era de 2 mil 361 millones y erogó 9 mil 950 millones. Según el informe de 2014, el gobierno sonorense obtuvo 60 mil 417 millones de pesos en ingresos, lo que representa un superávit de 13 mil 974 millones con respecto a los 46 mil 442 millones que le fueron aprobados para su ejercicio por el Congreso local. No obstante, la entidad registró elevados recursos extraordinarios se redujeron 61.3 millones de presupuesto al Poder Judicial y 34.7 millones al Legislativo. En las mismas condiciones se encuentran los organismos autónomos con 13.7 millones, el Isssteson con 108 millones, a pesar de que el Ejecutivo adeuda mil 891 millones al fondo de pensiones de este Instituto y a la Universidad de Sonora con 1.8 millones. Este análisis financiero practicado a 112 entes fiscalizables que operan con recursos públicos fue entregado a los integrantes de la Comisión de Vigilancia del ISAF en el Congreso local el pasado 31 de agosto y los legisladores tienen hasta el 15 de septiembre para calificarlo.