MONTERREY, NL (apro).- Cuatro empleados del penal estatal de Apodaca fueron detenidos por actos de corrupción, al permitir al el ingreso de droga y otros objetos prohibidos, informó el gobierno estatal. El sábado pasado, la Procuraduría estatal ejecutó órdenes de aprehensión en contra del subinspector Juan Francisco Medina Herrera, así como de los custodios Juan Carlos Espiricueta Vidal, Brígido Eleuterio Villanueva Vázquez y Miguel Ángel Hernández Martínez. A los detenidos se les investiga por haber permitido el ingreso de material ilícito al Centro de Readaptación Social de Apodaca. El miércoles 10 ocurrió una masacre en el penal de Topo Chico, donde fueron asesinados 49 internos por una disputa interna de poder. Después de un cateo generalizado en ese lugar, el miércoles 17, la Secretaría de Seguridad Pública estatal ordenó una revisión en el reclusorio de Apodaca, donde fueron localizadas más de 700 dosis de droga: 483 de mariguana; 123 de cocaína en polvo y 107 de cocaína en piedra. También fueron encontrados 12 teléfonos celulares, y lujos en las celdas, como aires acondicionados. Luego de que se investigara cómo entraron esos objetos al lugar, fueron detenidos estos cuatro empleados del estado por los delitos contra la seguridad en un centro de detención, abuso de autoridad y delito contra la salud, en su modalidad de narcomenudeo en su hipótesis de suministro. El juez dispuso que los ahora procesados fueran enviados al penal del Topo Chico, donde el jueves 3 de marzo se determinará si se les vincula a proceso. “De acuerdo con el nuevo sistema de justicia penal, a los mandos se les presume inocentes y serán tratados como tales en todas las etapas del procedimiento, mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia emitida por el órgano jurisdiccional”, aclaró el gobierno del estado. El arresto de estas personas se suma a la de otros cuatro detenidos por el homicidio colectivo en Topo Chico: Jesús Fernando Domínguez, subcomisiario de Administración Penitenciaria; Gregoria Salazar, directora; Arturo Bernal, subdirector, y el custodio José Reyes Hernández. Los cuatro enfrentan el delito de homicidio calificado y los tres primeros los de abuso de autoridad. Otro cateo fue efectuado el miércoles 23 en el penal de Cadereyta, donde la autoridad encontró una dosis de mariguana, cinco “puntillas” y dos memorias USB. No se reportó ningún arresto.