'Pensar en desaparecer la violencia es como decir que no celebraremos Navidad”: Astudillo
CHILPANCINGO, Gro. (apro).- “Pensar que en Guerrero va a desaparecer la violencia es como decirles que ya no vamos a celebrar la Navidad el 24 de diciembre”, expresó esta tarde el gobernador priista Héctor Astudillo Flores.
Quien durante su campaña electoral utilizó el lema “orden y paz”, esta tarde dijo que le “gustaría mucho” que la delincuencia desapareciera, es decir, que de seis asesinatos dolosos diarios que ocurren actualmente, se llegara a la tasa cero. Pero eso, insistió, “será muy complicado”.
El priista recordó que Guerrero tiene una historia de violencia y que el reto de las autoridades en sus tres niveles de gobierno es tratar de disminuir la cantidad de actos delincuenciales que se presentan en la entidad y, en particular, en el puerto de Acapulco.
“Cuando hablé de un año –plazo que se fijó para revertir los efectos de la narcoviolencia–, hablé de que sería para empezar a sentir realmente las acciones que se plantean. Pensar que en Guerrero va a desaparecer la violencia es como decirles que ya no vamos a celebrar el 24 de diciembre la Navidad”, expresó Astudillo.
Enseguida, el gobernador justificó su comparación: “Tampoco puedo hacer declaraciones temerarias ni que tampoco nadie me va a creer”.
Así lo dijo Astudillo durante una entrevista esta tarde en la residencia oficial Casa Guerrero, al oriente de esta capital, previo a un cónclave que sostuvo con alcaldes de varios municipios. Por cierto, los ediles fueron obligados a dejar su teléfono móvil en unas vitrinas resguardadas por personal del gobierno estatal.
Previamente, el gobernador habló sobre la violencia e inseguridad que persiste en la entidad, a pesar de que la semana pasada nombró a su amigo Roberto Álvarez como vocero único para temas de seguridad.
La semana pasada, el mandatario guerrerense admitió que la incidencia de inseguridad y violencia en la entidad es similar a las cifras que se presentaron en 2012, cuando se registró una cifra de seis homicidios dolosos al día.
Este periodo coincide con el primer año de la administración del exgobernador Ángel Aguirre Rivero, que se caracterizó por el brutal reacomodo de las bandas delincuenciales que a la fecha siguen en la disputa por las principales plazas de Guerrero y que han exhibido los nexos entre autoridades civiles y militares con el narcotráfico.
[caption id="attachment_439744" align="alignnone" width="702"] El cuerpo de un hombre asesinado en Acapulco el 4 de mayo. Foto: Bernandino Hernández[/caption]
“Acapulco es Acapulco”
El gobernador Héctor Astudillo Flores también opinó sobre la celebración de motociclistas realizada este fin de semana en Acapulco, cuando se reportaron dos muertos por riñas protagonizadas por los visitantes, así como accidentes en plena costera.
Así justificó los excesos de los motociclistas: “Desearíamos que todo el turismo que viniera a Acapulco o cualquiera de nuestros destinos turísticos tuviera un comportamiento como el de una reunión religiosa, pero Acapulco es Acapulco, no hay que olvidarlo”.
Luego, reprochó la actitud de los ciudadanos que han criticado la pasividad de las autoridades frente al evento denominado Aca Moto. Argumentó que los inconformes se asombran porque se trata de un turismo que viene a hacer mucho ruido “y hacen cosas que normalmente no hacen otros”.
Sobre las muertes y accidentes, el mandatario estatal dijo que la cifra violenta del Aca Moto fue inferior en comparación con la del año pasado. No obstante, afirmó que es necesario dialogar con los organizadores de la reunión anual de motociclistas en ese centro turístico para “cuidar estas cosas”.