PUEBLA, Pue. (apro).- La Fiscalía General de Puebla informó que tiene identificados a los autores materiales del asesinato del alcalde antorchista de Huitzilan de Serdán, Manuel Hernández Pasión, cometido el pasado 10 de octubre. La autoridad poblana señaló que con base a investigaciones estableció que los autores del asesinato fueron dos personas ubicadas como Pablo Daniel “n” y Cristian “N”, contra quienes existen órdenes de aprehensión, pero aún no han sido detenidos ni se ha precisado el móvil del crimen. La dependencia recuerda que el 10 de octubre, el edil fue encontrado sin vida en una desviación de la junta auxiliar de Huahuaxtla, perteneciente al municipio de Xochitlán, mientras que en la batea de la camioneta en la que viajaba, se halló el cuerpo de otra persona identificada como el escolta del alcalde. “En el punto donde ocurrió el homicidio, los agresores dejaron abandonado un vehículo Jetta blanco que robaron horas antes y que permanece asegurado”, refiere la dependencia. “Al dar seguimiento al caso”, agrega, “se identificó a los responsables y sus domicilios, por lo que se solicitó una orden de cateo que permitió asegurar más indicios y otro vehículo Jetta de color gris que los sujetos utilizaron para darse a la fuga”. Precisa que, de acuerdo con las investigaciones, se estableció que Pablo Daniel N. y Cristian N., son los autores materiales del hecho, son primos y cometían ilícitos en la región. “El día del homicidio, estuvieron dando seguimiento a las actividades del edil en Zacapoaxtla”, indica el boletín sin dar mayores detalles sobre el móvil del asesinato. “La Fiscalía General a través de la Agencia Estatal de Investigación mantiene acciones para cumplir las órdenes de aprehensión que se obtuvieron del Juez de Control en contra de los dos sujetos señalados”, menciona. Igual, la Fiscalía pide a las personas que tengan información para esclarecer este caso que aporten datos vía telefónica a la dependencia. Desde el asesinato del edil, el Movimiento Antorcha Campesina ha llevado a cabo una serie de marchas y movilizaciones para exigir que se detenga a los responsables. Los dirigentes, incluso, acusaron públicamente al sacerdote del Huitzilan de estar implicado en el asesinato, por lo que ya se hizo un pronunciamiento para proteger al párroco de posibles agresiones.