MONTERREY, NL (Apro).- Diana González, directora de la Cineteca de Nuevo León, fue removida de su cargo tras cuestionar la decisión de dejar en ceros el ejercicio operativo 2017 para la Cineteca. “El Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León (Conarte) confirma la remoción de la Mtra. Diana González Domínguez de su cargo como Coordinadora de Programación y Acervo de la Cineteca Nuevo León”, precisó un comunicado de la dependencia. Diana González comentó a Proceso que su salida se debió al “acoso laboral y a los maltratos” de quien fuera su jefe inmediato en el Centro de las Artes, Jorge García Murillo. González Domínguez cuestionó que García Murillo se otorgara a su propia dirección un presupuesto de 350 mil tan sólo para un diplomado, y en cambio dejará sin presupuesto a la Cineteca. Debido a los recortes ordenados por el funcionario, para el año 2017 la Cineteca sólo contará con un presupuesto de aproximado de 4.1 millones de pesos de fondos federales e ingresos propios, que serán repartidos entre la programación regular, ciclos, muestras, festivales, convocatorias, programas formativos y de intervención comunitaria. Diana González denunció que García Murillo opera el Centro de las Artes como un “hampón de la cultura”, ya que utiliza la dependencia para sus negocios personales. Desde que tomó posesión del Centro de las Artes, García Murillo fue cuestionado por la comunidad artística del estado por nombrar al frente de la Cineteca a Carlos Beltrán Briseño, quien fuera director del Museo Regional de Guadalajara. Durante su gestión al frente del Museo de Guadalajara, Beltrán fue denunciado por dejar gastos y facturas sin comprobar. Posteriormente fue despedido del Museo de Arte de Zapopan por desvío de recursos. Tras conocerse sus antecedentes, Carlos Beltrán sólo estuvo una semana al frente de la Cineteca y después de su salida se nombró a Diana González. Posteriormente de tomar su cargo, García Murillo se dedicó “al boicot institucional para el proyecto de promoción de cine de Nuevo León”, dijo González Domínguez. “A la vuelta de un año más bien amargo, entiendo que fui forzadamente aceptada por García Murillo para cubrir de manera aceptable ante la sociedad y los medios, el escándalo producido por el invitado personal de García Murillo al puesto de coordinador Carlos Beltrán”. García Murillo, quien es dueño de una galería” también ha sido cuestionado por la comunidad cultural por la decisión de usar instalaciones como la Fototeca para exponer obra pictórica de los artistas que promueve.