PF enfrenta convoy de presuntos sicarios en Tamaulipas, pero logran escapar

martes, 6 de junio de 2017 · 15:40
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Agentes de la División de Fuerzas Federales de la Policía Federal, fueron atacados al atender una denuncia ciudadana que reportó la presencia de vehículos con civiles armados sobre el Libramiento Reynosa Sur II, con dirección al municipio de Río Bravo, en Tamaulipas. Tras repeler la agresión, policías federales aseguraron vehículos, armas de alto poder, cargadores y chalecos balísticos Un comunicado emitido por la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), señala que al atender el reporte, los agentes adscritos a esta institución acudieron al punto y ubicaron el convoy con al menos 10 camionetas. Al notar la presencia de los federales, los tripulantes de los vehículos aceleraron la marcha, iniciándose una persecución. Al aproximarse a las unidades, los policías federales fueron agredidos con armas de alto poder, lo que motivó a repeler la agresión. Metros más adelante uno de los vehículos agresores perdió el control y sufrió una volcadura hasta impactarse contra el muro de contención, motivo por el cual los tripulantes de las dos últimas camionetas huyeron hacia la maleza dejando los vehículos abandonados. Los federales procedieron a la inspección de los vehículos donde fueron localizadas y aseguradas seis armas largas, 39 cargadores abastecidos, cuatro chalecos balísticos y fornituras. De acuerdo con la CNS, el caso se turnó al Agente del Ministerio Público de la Federación, autoridad que continuará con las indagatorias correspondientes. Apenas el pasado domingo, se registró otro ataque contra policías federales que ocasionó la muerte de tres presuntos delincuentes en la colonia Cumbres en la ciudad de Reynosa. Ese día, fueron aseguradas cuatro armas de fuego. El enfrentamiento ocurrió en las primeras de ese día. Posterior al ataque, autoridades federales y estatales realizaron un operativo para controlar la situación. Ese día, también se registró una persecución hasta el bulevar Hidalgo, donde los tres agresores murieron.

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