CHILPANCINGO, Gro. (apro).- El dirigente estatal del PRI en Guerrero, Heriberto Huicochea Vázquez, admitió que firmó un contrato con el gobierno de Héctor Astudillo para la construcción de una fosa común en un predio de su propiedad por la cantidad de siete millones de pesos, de los cuales sólo ha cobrado uno. En conferencia de prensa, recordó que en 2013 el entonces presidente municipal de esta capital, Mario Moreno Arcos, del PRI, le otorgó la concesión para habilitar en dicho terreno un panteón privado, conocido como La Paz. La concesión, dijo, fue por 15 años, con la posibilidad de renovación por el mismo lapso. Huicochea Vázquez comentó que el contrato firmado con el gobierno estatal lo obligó a construir 280 bóvedas individuales divididas en siete módulos, cada una con un valor de 25 mil pesos. Además, aceptó que él y su familia le vendieron la idea a los gobiernos estatal y municipal de “las ventajas y oportunidades de un nuevo cementerio porque el panteón central y el cementerio ubicado al norte de la capital ya no tienen capacidad”. Este servicio, dijo, “está abierto para la población, el cementerio tiene costos para quienes no cuentan con recursos, otorgamos créditos y especial atención para todos los niveles económicos”. El dirigente estatal priista precisó que el panteón privado donde se construyó la fosa común del gobierno es parte del negocio de su familia, “porque la Fiscalía estatal y la Secretaría de Salud están comprando una parte de los servicios que estamos otorgando”.