CAMPECHE, Camp. (apro).- Ana del Carmen del Río Lastra, exesposa de Miguel Ángel Villarino Arnábar, deslindó hoy al gobierno del estado del encarcelamiento del periodista, quien se ha distinguido por sus agudas críticas al régimen estatal, y sostuvo que en este caso no hay trasfondo político. Villarino Arnábar está preso en el penal de San Francisco Kobén desde el pasado 8 de marzo por una disputa legal de índole familiar con Del Río Lastra, quien lo demandó por presunto incumplimiento en el pago de pensión y la sustracción del hijo de ambos. En conferencia de prensa, en la que estuvo flanqueada por los abogados Alfonso Cardeña y Manuel Iris Balam, Del Río Lastra, quien es sobrina del secretario de Gobierno, Carlos Miguel Aysa González, leyó un comunicado en el que rechazó la intromisión del gobierno del estado en su disputa legal con Villarino. Reconoció que el periodista “es muy generoso y él se fijó” una pensión de 5 mil pesos mensuales para su hijo y adicionalmente se encargaría de cubrir los gastos de su educación y médicos, pero que desde agosto dejó de cumplir y sólo depositó mil pesos para cubrir los cinco meses que no pagó. Dijo que su relación con su exesposo era “cordial” hasta que ella volvió a casarse. Aunque el periodista, que sigue escribiendo su columna política desde la prisión, ahora bajo el título “Crónicas carcelarias”, nunca hizo alusión directa sobre ella, Del Río Lastra argumentó que decidió salir hasta ahora a dar su versión del caso porque Villarino la ha dejado “como una mala persona ante la opinión pública” y ante su hijo. Por las violaciones cometidas a su debido proceso, el periodista, quien está etiquetado por el gobierno del estado como “enemigo de Campeche”, acusa directamente al gobernador Alejandro Moreno Cárdenas de su encarcelamiento. En prisión, Villarino Arnábar denunció vejaciones y amenazas de muerte. Su caso fue documentado y ameritó la emisión de alertas de organizaciones defensoras de la libertad de expresión y pronunciamientos para exigir al gobierno estatal garantías para la protección del periodista.