CUERNAVACA, Mor. (apro).- El Sindicato Independiente de Trabajadores Académicos de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (SITAUAEM) acordó estallar la huelga en la institución académica a partir del medio día del próximo lunes 10, en caso de que no les depositen la nómina correspondiente a la catorcena que vence este miércoles 5. Si se concreta esa medida, más de 43 mil estudiantes de bachillerato, licenciatura y posgrado se verían afectados. Según universitarios, detrás de la falta de recursos económicos que tiene en crisis a la UAEM, está su déficit histórico, pero particularmente la indolencia de Graco Ramírez, quien durante todo su sexenio les ha escatimado los recursos. Apro ha informado desde 2014 sobre los enfrentamientos entre el gobierno del perredista y la institución académica, que subieron de tono cuando a finales de 2015 el entonces rector, Jesús Alejandro Vera Jiménez, tomó como bandera -junto con el poeta Javier Sicilia, fundador del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad- el acompañamiento a las víctimas de la violencia, que desde entonces se han multiplicado en la entidad. El caso de las fosas clandestinas en Tetelcingo, y luego las que se descubrieron en Jojutla, fue lo que ocasionó los peores enfrentamientos. Al final, el gobierno de Graco Ramírez inició una persecución política y policiaca contra Vera Jiménez, que culminó con su renuncia adelantada en diciembre de 2017 (su rectorado debía terminar en marzo) y luego su detención por varias horas, en enero pasado. El gobierno morelense ha utilizado varias estrategias para reventar económicamente a la UAEM, entre ellas la negativa a entregar en tiempo y forma los recursos destinados a esa institución, así como el cálculo tramposo del propio presupuesto. Según la Constitución local, la UAEM debe recibir anualmente el 2.5% del total del presupuesto del estado, pero ese porcentaje lo ha recibido a lo largo de todo el sexenio de Graco Ramírez. Es decir, el gobierno morelense no ha entregado recursos por más de mil millones de pesos, con los cuales la institución académica podría salvar el año en curso, tomando en cuenta que tiene un déficit de aproximadamente mil 600 millones de pesos. Hasta este momento, el presupuesto que resta por ser entregado a la UAEM es sólo el de diciembre, dado que solicitó por adelantado el correspondiente a septiembre, octubre y noviembre para poder pagar la nómina y prestaciones de julio y agosto. Sin embargo, aún deben pagarse las dos catorcenas de septiembre, octubre, noviembre y diciembre, además de los 90 días de aguinaldo que por ley y contrato colectivo se entregan en la entidad. Frente a ese panorama, el SITAUAEM decidió esta mañana que de no cubrirse este miércoles la catorcena que les corresponde, realizará paros técnicos el jueves y viernes, días que aprovechará para iniciar los preparativos para la huelga que estallaría el lunes a las 12 del día. El secretario de Gobierno, Ángel Colín López, se lavó las manos al afirmar que “el gobierno de Morelos nada puede hacer por la UAEM. A un mes de salir (Graco Ramírez) es difícil que podamos seguir transmitiendo cantidades grandes y la Universidad tiene autonomía para manejar sus recursos”, dijo. Añadió en entrevista: “Es un déficit de hace meses, pero nosotros duplicamos los recursos que teníamos para la Universidad; estamos analizando de qué manera podemos ayudar, pero tenemos la limitante de que faltan 30 días para concluir el gobierno”. Y mientras el rector Gustavo Urquiza Beltrán sostuvo reuniones con senadores y diputados federales por Morelos para demandar exhortos y gestiones a favor de la UAEM, la secretaria general Fabiola Álvarez exigió a las autoridades locales “cumplir su palabra”. “Les recordamos a nuestras autoridades actuales del gobierno del estado que cumplan con lo que se comprometieron, que fue resolver satisfactoriamente hasta el mes de diciembre el pago de todos los salarios y prestaciones que tienen los trabajadores”, apuntó. De igual manera, advirtió que está en riesgo la economía de más de seis mil trabajadores universitarios sindicalizados, académicos y administrativos, así como los de confianza, además del semestre de más de 43 mil estudiantes de bachillerato, licenciatura y posgrado. Ello sin contar con que cada catorcena la UAEM inyecta casi 50 millones de pesos a la economía local, pues los trabajadores consumen en prácticamente toda la entidad. Pese a los múltiples llamados del Congreso local y del gobernador electo, Cuauhtémoc Blanco Bravo, para resolver la situación en la UAEM, Ramírez ha hecho mutis. Algunos observadores han planteado que la intención del gobierno del perredista es dejar la papa caliente al exfutbolista, quien enfrentaría su primera crisis de gobierno con el caso de la institución académica.