MEXICALI, BC. (apro).- El sector empresarial en la entidad demandó al gobernador Jaime Bonilla una serie de beneficios fiscales que les permitan hacer frente a la crisis económica prevista a propósito de la pandemia de Covid-19. A través del Consejo Coordinador Empresarial de Mexicali, los empresarios propusieron crear un Comité de Emergencia Estatal donde se vayan discutiendo las necesidades del sector, pero las primeras medidas que solicitan son: la suspensión temporal del cobro de impuestos locales como derechos por suministro de agua, por construcción, impuesto sobre nóminas, impuesto sobre hospedaje, así como todos aquellos incrementos realizados de manera reciente a diversas materias, por ejemplo, la gasolina. No se incluye el Predial Además, piden que se suspenda temporalmente el cobro de impuestos federales, como Impuesto sobre la Renta, Impuesto al Valor Agregado, cuotas de INFONAVIT, así como el pago de las cuotas obrero-patronales al Instituto Mexicano del Seguro Social. También piden extender o suspender los plazos de vigencia de: licencias, permisos y autorizaciones hasta por 90 días adicionales. Así como suspender los plazos en los actos de fiscalización y, recursos administrativos por parte de la autoridad local y federal. El CCE pide también financiamiento de Nacional Financiera para las pequeñas y medianas empresas, con el objetivo de reactivar la economía; apoyo para que los bancos no generen intereses en los cobros de los próximos tres meses y den facilidades de pago a 12 meses, así como permitir la apertura de pequeños negocios en los hogares. El empresariado exige además que se garantice la cadena de suministro y evitar abusos como incremento injustificado de precios. En el comunicado emitido por el CCE de la localidad se destaca el cierre de filas para ayudar a las medidas de prevención, privilegiando la salud de sus trabajadores y sociedad en general.

Con participación del gobierno

Lo que se busca, dicen, es hacer un frente ante las complicaciones que pudieran avecinarse debido al coronavirus, donde estén tanto el gobernador, Jaime Bonilla como la presidenta municipal de Mexicali, Marina del Pilar Ávila”. Consideran que al ampliarse el periodo de estancia en casa generará “de manera inminente” disminución de clientes, las bajas ventas, e incluso, el cierre temporal o total de distintos negocios y empresas”. La consecuencia de la crisis mundial y la suspensión de actividades humanas debido a la pandemia desbordará problemas fuertes en la economía, especialmente paralizará el flujo del recurso monetario, dice y como argumento, recuerdan la crisis económica provocada por la epidemia de influenza que se vivió en el país en 2009 con una afectación que costó el 7% del Producto Interno Bruto (PIB), es decir, 57 mil millones de pesos.

“Con el propósito de contener la situación, se requiere afianzar un liderazgo único, por lo que el CCE y la comunidad empresarial está dispuesta a colaborar realizando acciones fuertes y todo lo necesario para evitar que el daño sea mayor”, establecen y piden los beneficios fiscales antes mencionados.

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