Policías de Jalisco detenidos por protestas 'sólo siguieron órdenes”, acusan familiares
GUADALAJARA, Jal. (proceso.com.mx).- Familiares y amigos de los dos policías detenidos por presuntamente seguir órdenes del crimen organizado para detener el pasado viernes a manifestantes afuera de las instalaciones de la Fiscalía del estado se manifestaron afuera de Casa Jalisco para pedir su liberación pues, aseguran, ambos siguieron instrucciones de sus superiores, y que no les permiten tener un defensor particular.
Los elementos detenidos son el director operativo (J3), el comandante Salvador Perea, y el policía ministerial, Raúl Gómez Mireles, están acusados de abuso de autoridad, de realizar detenciones ilegales y de desaparición forzada.
Los hechos ocurrieron el pasado viernes cuando detuvieron a jóvenes que se dirigían a protestar afuera de la Fiscalía para exigir la liberación de los arrestados del jueves tras la violenta manifestación en el centro de la ciudad, en la que se pedía justicia por la muerte de Giovanni López, quien murió a manos de policías de Ixtlahuacán de los Membrillos.
[caption id="attachment_633373" align="aligncenter" width="761"] Familiares y amigos de los policías detenidos exigen el cumpliemiento de los derechos de ambos afuera de Casa Jalisco[/caption]
El abogado de uno de los señalados, Óscar Arturo Díaz, dijo que no le han permitido tener contacto con su cliente, y que están "presionando al comandante Perea para que él acepte la responsabilidad, por eso no dejan entrar a ningún defensor".
Agregó que presentaron un amparo, pero el Juez de Distrito nunca lo mandó al secretario. También acudieron a solicitar apoyo a Visitaduría, a la Comisión Estatal de Derechos Humanos y a la Fiscalía Anticorrupción, pero "estaba cerrado".
El abogado recalcó que el gobernador, Enrique Alfaro, y el fiscal estatal, Gerardo Solís Gómez, gozan de una buena relación con los titulares de las dependencias y organismos mencionados, por lo que considera que “todos se coligieron para bloquearnos la estrategia de defensa. Ellos están tratando de lavarse las manos, y que tanto Perea como Mireles, Jalisco los vea como culpables cuando son víctimas de las irresponsabilidades de estos señores".
Óscar Díaz apuntó que a los imputados se les asignó un abogado de oficio de la propia Fiscalía, puesto que les informaron que sus defensores particulares no se presentaron, "lo cual es mentira".