MONTERREY, NL (apro).- Un jardín de niños de una sola aula, del municipio empobrecido de Aramberri, al sur de Nuevo León, obtuvo uno de los premios de 20 millones de pesos de la denominada rifa del avión presidencial que ayer sorteó la
Lotería Nacional.
El kínder es uno que carece de nombre, ubicado en la comunidad rural de El Yerbaniz, conformada por unas 30 familias, ubicada a 320 kilómetros de distancia de Monterrey, adscrito al Consejo Nacional de Fomento Educativo y que cuenta con apenas 10 alumnos, reveló una fuente de la Secretaría de Educación.
El recurso obtenido con el cachito ganador será destinado a la remodelación del plantel y también de la comunidad, señaló la fuente.
Imágenes que circulan en redes sociales muestran el jardín de niños, identificado solamente como Escuela Preescolar Comunitaria 19INM_102786, a donde también acuden a tomar clases niños de primaria de la misma comunidad, que hasta hace poco estaba construido con madera y techo de lámina, y que recientemente fue remodelado para hacerlo de concreto.
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Al parecer, el boleto ganador fue donado por un empresario que adquirió miles de cachitos, invitado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, y los repartió entre planteles educativos, de México.
Aterriza avión de la suerte en hospital de Fresnillo
De no ser por el “cachito” de lotería, la clínica hospital del ISSSTE de Fresnillo difícilmente hubiera tenido recursos.
Entre 6 millones de boletos que se imprimieron, mil 50 llegaron a la clínica del ISSSTE de Fresnillo y de ellos, el marcado con el número 1285450, resultó premiado.
“Todavía no me la creo, todavía no lo creemos”, dice Andrés Piñón, sub director administrativo de la Unidad Médica Familiar de Fresnillo.
Apenas han pasado unas horas y el funcionario ya piensa cómo invertirán los 20 millones de pesos del premio.
“Pensamos en un tomógrafo que urge desde hace 3 años y que no hemos podido comprar, levantaremos una barda perimetral y reconvertiremos una parte de la clínica para atención a pacientes covid-19 y haremos algunas remodelaciones”. señala en entrevista.
Apenas el lunes 8 de septiembre, Andrés Piñón acudió a las oficinas centrales del ISSSTE en la capital para recoger una carta con los mil 51 folios que le correspondían al hospital.
Incluso recuerda que directivos lo regañaron porque no acudió personalmente a recibir sus boletos un día antes, el domingo 7 de septiembre.
“Valió la pena la regañada”, dice ahora en broma y feliz.
“Hay muchas necesidades de personal, equipamiento, mantenimiento y medicinas, 20 millones para una clínica como la nuestra es poco, pero se invertirán muy bien y serán de gran ayuda”, aseguró el sub director administrativo.
Así, el “faraónico” avión presidencial, como lo llamó el Presidente López Obrador será una bocanada de oxígeno para la clínica.
“He recibido muchas llamadas de compañeros, todos coincidimos que nunca imaginamos que saliéramos premiados”, insiste.
Ahora los directivos de la clínica del ISSSTE esperan que la Lotería Nacional y el gobierno federal les expliquen el modo en el que les serán entregados los recursos.
“Vamos a invertirlos de manera transparente y eficaz para el bien de los derechohabientes y del pueblo de Fresnillo”, asegura el directivo quien tiene apenas 45 días en el cargo. (
Con información de Gerardo Romo/ Ágora Digital)
