Violencia

Hallan cuerpos desmembrados en territorios controlados por el huachicol en Hidalgo

Este miércoles, un ataque armado en la carretera Portezuelo-Palmillas dejó dos muertos, incluido un infante; además de dos heridos. Se trata de la misma vía donde el 15 de septiembre fue encontrado un cuerpo despedazado y con un mensaje que hacía referencia a la pelea entre grupos criminales. 
jueves, 25 de noviembre de 2021 · 08:25

HIDALGO (apro).- Cuerpos con señales de tortura, enteros o despedazados, han sido hallados en municipios de la región conocida como el Valle del Mezquital, en Hidalgo, un territorio en disputa por grupos de la delincuencia organizada que pelean por el control de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y las rutas del narcomenudeo. 

Este miércoles, un ataque armado en la carretera Portezuelo-Palmillas dejó dos muertos, incluido un infante; además de dos heridos. 

Se trata de la misma vía donde el 15 de septiembre fue encontrado un cuerpo despedazado, dentro de dos cajas, envuelto en bolsas negras y con un mensaje que hacía referencia a la pelea entre grupos criminales. 

La Guardia Nacional reportó este 24 de noviembre que al interior de un vehículo se encontraban, con impactos de armas de grueso calibre, los cuerpos de quienes fueron identificados como L.A.D.H. y I.A.F., de 41 y seis años, respectivamente.  

Dos mujeres más, con heridas graves, se encontraban aún con vida. Las corporaciones de seguridad del estado y municipios de la región desplegaron un operativo para buscar a los agresores, sin resultados.  

Historial de atrocidades

La carretera Portezuelo-Palmillas es un tramo con un longevo historial de cadáveres hallados: sólo entre los últimos casos está el de un expolicía de Tecozautla que había sido reportado como desaparecido, que la policía localizó la madrugada del 2 de noviembre a la altura de la comunidad Donguiño, municipio de Alfajayucan, a un costado de la cinta asfáltica. El cuerpo tenía signos de violencia. Asimismo, el 23 de julio, identificó el de un hombre, torturado, con un disparo en la cabeza.   

Incluso, la madrugada del 21 de febrero un comando armado ingresó al Hospital General de Huichapan para rescatar a cuatro sujetos que minutos antes habían sufrido un accidente en esta carretera, pero en el tramo de El Carmen. Tras amagar al personal, se llevaron a los heridos en una ambulancia propiedad del municipio. 

Este día, por la mañana, a 30 kilómetros de distancia, la policía de Zimapán también encontró cadáveres de dos hombres, con señales de violencia, en la colonia Muhi, cerca de una cancha de futbol. 

Los cuerpos estaban amarrados y con marcas de tortura. Los elementos llegaron tras una llamada de alerta al número de emergencia.  

Seis días antes, en el mismo municipio, un hombre fue baleado en un paraje conocido como la Pista. Con base en el reporte de la corporación, el cuerpo fue encontrado al interior de un vehículo Nissan con varios impactos. Según la reconstrucción de hechos, sujetos a bordo de una motocicleta le dispararon.

Grupos delictivos  

Zimapán es gobernado, desde diciembre de 2020, por Alan Rivera Villanueva. Él recibió el municipio de su hermano, Erick Marte –prófugo, con orden de aprehensión por el delito de discriminación agravada– a quien el gobierno del estado acusó públicamente de proteger al actual líder de Los Hades, Orlando Medina, El Fénix. No obstante, no abrió ningún procedimiento en su contra. 

Los Hades o Cártel de Palmillas operan a través de una conexión en los límites entre Querétaro y Huichapan, Hidalgo, y se extienden en territorio estatal hasta Zimapán, Tasquillo e Ixmiquilpan. Son responsables de robo de hidrocarburo a los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y narcomenudeo.  

Sin embargo, el Cártel de Palmillas es sólo un grupo en el escenario delictivo en el Valle del Mezquital, que, según informes de inteligencia a los que se tuvo acceso, rivalizan con Pueblos Unidos –una célula de Tepetitlán que se autodenomina “a la caza” de huachicoleros–, Los Michoacanos y Los Americanos, entre otras organizaciones criminales.   

Los enfrentamientos y asesinatos con violencia no son exclusivos de estos municipios: el 17 de agosto, cinco cuerpos fueron localizados en un terreno de cultivo en la localidad de Bomanxotha, en Tecozautla, después de que pobladores reportaran que al interior de una bolsa semienterrada había restos, de un cadáver despedazado.    

Además, el 14 de octubre, un brazo fue hallado en la ribera del río Tula, a la altura de Ixmiquilpan, por referir algunos de los más recientes. 

Los cadáveres “vienen y nos los tiran”

El 8 de agosto, en entrevista con medios tras su comparecencia en el Congreso del estado como parte de la glosa del quinto informe, el secretario de Gobierno, Simón Vargas Aguilar, dijo sobre los cadáveres hallados con signos de tortura: “vienen y nos los tiran”. 

 "Constantemente aparecen (los cuerpos)", reconoció; sin embargo, afirmó que "como el 80, 85 por ciento, son personas que no son originarias de aquí".  

Cuestionado de qué demarcaciones son estos cuerpos que aseveró son "tirados" en Hidalgo, sostuvo: "básicamente de Querétaro y el Estado de México", sin proporcionar más información al respecto.  

El 16 de noviembre, igualmente en su comparecencia, el secretario de Seguridad, Mauricio Delmar Saavedra, reiteró la posición del gobierno sobre la no existencia de cárteles, además de señalar al huachicol como “un delito de sangre” que es el principal causante de la violencia en el estado. 

“Más que tráfico de drogas, que no lo tenemos en Hidalgo, hay narcomenudeo. El tráfico de drogas ya son los cárteles de las drogas, que no los tenemos en el estado de Hidalgo”, señaló. 

“Con respecto a las personas que se han venido a esconder a Hidalgo –mencionó tras la detención de miembros de la Unión Tepito, el Cártel del Golfo y remanentes de Los Zetas que se refugiaban en territorio estatal–, a eso vienen, como ratas. Así lo he dicho, sin ofender a las ratas, porque a lo mejor estoy ofendiendo a algún protector de animales y me va a llamar la atención, y tiene toda la razón. Pobres ratas. (Los líderes de organizaciones) son cobardes, son flojos y vienen, se enconden, literal”, afirmó.

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