SAN LUIS POTOSÍ, S.L.P. (apro).– Personal médico del Hospital Central “Ignacio Morones Prieto”, ubicado en la capital del estado, anunció un nuevo paro de labores y una protesta para este jueves 4 de marzo, tras meses de padecer “una crisis de salud y económica sin precedentes”, con carencias de insumos, medicamentos y recursos para atender a los pacientes en dicha institución.

La asociación de médicos del Hospital Central anunció que efectuará una manifestación en la glorieta González Bocanegra el jueves por la mañana, puesto que sus múltiples llamados, quejas y peticiones a las autoridades de Salud del estado y al propio gobernador Juan Manuel Carreras López no han dado resultado.

El hospital, señalaron integrantes de la asociación en un comunicado para anunciar la protesta, “el día de hoy se encuentra en el colapso por la carencia de insumos, recursos, medicamentos, equipo médico, mínimos necesarios para la prestación del servicio”.

Por distintas redes, el personal está convocando a esta concentración del jueves y difundiendo la situación al interior del Hospital Central.

El personal médico denunció una deficiente gestión del gobierno, “su indolencia e irresponsabilidad ante la magnitud de esta situación y las consecuencias”.

Hasta hace unos días, era la titular de los Servicios de Salud del estado la actual candidata de Morena a la gubernatura, Mónica Liliana Rangel Martínez.

Los trabajadores del hospital “Ignacio Morones Prieto” habían realizado ya otra manifestación hace varias semanas, aún durante la gestión de la actual candidata.

El 1 de diciembre marcharon por avenidas de la ciudad para reclamar el pago de salarios y prestaciones pendientes, que en total sumaban más de 500 millones de pesos.

El 2 de febrero, el personal médico informó a la dirección general del hospital que trabajaría “bajo protesta” por el desabasto de insumos y medicamentos, particularmente los destinados a tratamientos oncológicos.

El 26 de febrero, en algunos medios, publicaron un desplegado respaldado con 193 firmas y dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador y al gobernador priista Carreras López, en el que se reiteraron las carencias en materiales e insumos también quirúrgicos, lo que ocasionó –afirmaron– el retraso o suspensión de más de 300 cirugías.

En ese momento referían tener a 39 pacientes con cáncer de mama que no habían recibido sus tratamientos desde mediados de enero, a pesar de que el hospital es la única unidad médica acreditada en el estado para atender pacientes adultos y menores en oncología.

El Hospital Central es administrado por los Servicios de Salud desde noviembre del año pasado, después de la transición derivada del Insabi. Cuenta con 250 camas censables y 174 no censables, donde se atiende a pacientes en 76 especialidades médicas, además de que funciona como hospital escuela en vínculo con la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.