GUADALAJARA, Jal. (apro).- El candidato presidencial de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador y su esposa Beatriz Gutiérrez Müller, desayunaron en la casa del Arzobispo Cardenal José Francisco Robles Ortega, sucesor del Cardenal emérito Juan Sándoval Iñiguez, quien en el 2006 se declaró su abierto opositor. El prelado llegó incluso a pedirle al gobierno de Estados Unidos que impidiera ser presidente al tabasqueño, quien gozaba de la preferencia del electorado y quien de acuerdo con su versión, fue víctima de un complot para impedirle ganar las elecciones. De acuerdo con el cable 06VATICAN61 publicado por WikiLeaks el año pasado, Sandoval Iñiguez expresó su preocupación por el avance de la izquierda en la región y preguntó si el entonces presidente estadunidense, George W. Bush, podría hacer algo para detener el avance del líder de izquierda porque durante el tiempo en que López Obrador fue jefe de gobierno de la Ciudad de México aumentó la violencia y el crimen. Entrevistado al salir del foro Honestidad y Combate a la Corrupción, López Obrador comentó que conoce al Arzobispo Robles Ortga desde 2006, cuando en Monterrey tuvo un encuentro privado. El candidato aseguró que el Cardenal se comprometió a no actuar de manera partidista en la elección presidencial del 1 de julio. “Se trata de un Cardenal, que tiene mucha integridad. Es un hombre de apego a principios cristianos. Es un pastor seguidor de la doctrina cristiana. Es un hombre íntegro, honesto”, expresó en un lenguaje característico de los cristianos, religión que profesa el tabasqueño. En la casa del Cardenal ubicada en la exclusiva zona Colinas de San Javier, resaltó que no tocaron temas como la familia, sino del diálogo ecuménico religioso para lograr la tolerancia entre creyentes de todo tipo de ideologías y credos. Al respecto, el vocero de la Arquidiócesis de Guadalajara, Antonio Gutiérrez Montaño, confirmó el encuentro que se llevó a cabo, subrayó, a petición del candidato presidencial. La Arquidiócesis de Guadalajara es la segunda más importante después de la Arquidiócesis Primada de México. La ciudad es la segunda más poblada después del Distrito Federal. En 2006 la Iglesia Católoica tomó partido pese a que México vive en un Estado laico llamó desde el púlpito a votar en contra de López Obrador.