Para el investigador Edgardo Buscaglia, es "inaudito" que las instituciones responsables del combate al crimen organizado carezcan de instrumentos para desmantelar las redes patrimoniales y financieras de los cárteles de la droga; máxime que, sostiene, casi el ochenta por ciento de los sectores económicos del país están infiltrados por el narco En estas condiciones, afirma el asesor del Instituto de Entrenamiento para el Mantenimiento de la Paz de la ONU, el gobierno de Felipe Calderón no tiene con qué sostener, con posibilidades reales de éxito, el combate al l narcotráfico
Los cárteles de la droga y sus redes patrimoniales y financieras, que son base de su expansión y su capacidad de respuesta frente a los embates del gobierno federal, están intocadas, y mientras no se destruyan las cadenas de testaferros y complicidades entre políticos y capos, "la guerra contra el narcotráfico puede darse por perdida desde este momento"
Quien sustenta esta tesis es Edgardo Buscaglia, profesor visitante y coordinador del Programa Internacional de Justicia y Desarrollo del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM)
El también catedrático de la Universidad de Columbia y asesor del Instituto de Entrenamiento para el Mantenimiento de la Paz de la ONU puntualiza: El gobierno de Felipe Calderón no se preparó para enfrentar la guerra contra el narcotráfico Y considera inaudito que las instituciones responsables del combate criminal no cuenten con instrumentos para desmantelar las redes patrimoniales y financieras extendidas dentro y fuera de México
Esa es la razón, explica el investigador, de que más de la mitad de los casi 2 mil municipios del país estén "completamente feudalizados" por el crimen organizado y de que sus figuras simbólicas ?Joaquín El Chapo Guzmán Loera, Ismael El Mayo Zambada, Ignacio Coronel, Eduardo Costilla, El Coss, entre otros? ejerzan no sólo el poder criminal, sino que ya construyeron andamiajes muy sólidos para que sus cómplices se posicionen en las estructuras del poder político y empresarial del país
Especialista en el estudio del crimen organizado a escala internacional, Buscaglia señala que la banca mexicana está infiltrada por el dinero de la delincuencia y es cómplice de los grupos delincuenciales "por omisión"; el motivo: no cumple con las recomendaciones del Grupo Financiero Internacional (Gafi) para prevenir el lavado de dinero, ni utiliza el instrumental técnico y legal del que dispone para impedir que el dinero sucio circule por las arterias del sistema financiero", pues en muchos casos los banqueros argumentan que estas medidas les elevan los costos de operación
?¿La pasividad de la banca mexicana para actuar en materia de lavado de dinero y otros delitos financieros se traduce entonces en una abierta complicidad? ?se le inquiere
?El sector financiero debe transformarse en un partícipe activo que apoye al gobierno federal Lamentablemente no vemos este apoyo operativo hasta hoy Lo veo paralizado, pasivo, se arrastra de los pies Debería de haber mucho más activismo en ese sentido
Explica: "Cuando por omisión o porque estás arrastrando los pies no estás implementando las mejores prácticas internacionales que la banca de la Unión Europea está aplicando de manera efectiva, pues no hay duda de que (quiérase o no) se está siendo cómplice de una situación catastrófica de delincuencia organizada y de corrupción política que le cuesta al país miles de muertos al año y deriva en una ingobernabilidad que ya parece irreversible"
Este es un extracto del reportaje que publica la revista Proceso en su edición 1707 que empezó a circular este domingo 19 de julio</strong