Recuerda el INBA a Vicente Leñero a un año de su muerte
MÉXICO, DF (apro).- En el Palacio de Bellas Artes, donde hace cuatro años Vicente Leñero (1933-2014) dictó su discurso de ingreso a la Academia Mexicana de la Lengua, el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) realizó la mesa redonda Recordando a Vicente Leñero, en memoria del escritor y periodista, cuyo primer aniversario luctuoso se cumple este jueves 3.
La sala Manuel M. Ponce del máximo recinto cultural del país lució llena en su totalidad. Ahí se reunieron el dramaturgo y ensayista David Olguín, el periodista José Luis Martínez y el escritor Héctor Orestes Aguilar como moderador, para charlar sobre la obra de Leñero quien, junto con Julio Scherer, fundó el semanario Proceso en 1976.
Entre el público estaba Isabel y Mariana Leñero Franco, dos de las cuatro hijas del autor de Los albañiles (1964) y Los periodistas (1978).
Durante la charla, los participantes se inclinaron hacia la obra literaria y dramatúrgica del escritor, ensayista, guionista de cine y televisión, cuentista y periodista.
El encuentro fue convocado por la Coordinación de Literatura del INBA e inició con la transmisión de un video del Canal 22, narrado en la voz de Fernando de Ita. La pieza destacó a Leñero a la par del novelista Jorge Ibargüengoitia.
Después siguió una lectura de José Luis Martínez, quien recordó las raíces de Leñero como eje central en su obra, pues aunque nació en Guadalajara, Jalisco, siempre radicó en el Distrito Federal.
También habló de su padre como figura principal en su vida. De él heredó el gusto por la lectura y el ajedrez. Por él decidió estudiar ingeniería civil en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Sin embargo, recordó que nunca ejerció esa carrera, pues se enlistó en la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, donde obtuvo una beca en 1956 para estudiar en el Instituto de Cultura Hispánica de Madrid, España.
“Vicente quería escribir y así lo hizo. Incursionó en las radionovelas, dirigió Claudia (1969 a 1972) y posteriormente Revista de Revistas (de 1973 a 1976) de Excélsior, a raíz de la cual conoció a Julio Scherer García a quien acompañó en 1976 frente al llamado ‘Golpe a Excélsior’ que llevó a cabo el gobierno de Echeverría. Esa experiencia le concedió quizás su mejor libro: Los periodistas”, dijo Martínez.
El apasionado
David Olguín –quien conoció a Leñero desde hace casi 20 años y con quien tuvo “el placer de convivir e incluso discutir muchos temas de la dramaturgia mexicana en comidas y algunas charlas”–, consideró “un honor” evocar a “ese gran maestro”:
“Cronista, periodista y narrador, Leñero fue uno de los hombres más apasionados del teatro es la escena mexicana, uno de los grandes dramaturgos del siglo XX”, dijo.
Tras leer el texto del jalisciense titulado Autorretrato a los 33, destacó que Leñero “entró al teatro por el lado del periodismo y lo logró con éxito. Su obra La mudanza de 1979 lo consagró y lo distinguió como un hombre más cercano a la dramaturgia norteamericana diseccionando los problemas sociales y realizando un análisis de la realidad”.
El moderador Héctor Orestes preguntó a Olguín cuáles serían las obras de Leñero más viables como inducción para las nuevas generaciones.
La respuesta fue La mudanza y La noche de Hernán Cortés –llevada a escena por Luis de Tavira–, “por los elementos innovadores en el texto que a pesar de los años se sostiene de manera maravillosa”. De su literatura destacó El evangelio de Lucas Gavilán (1979) y Asesinato (1985).
Durante la charla se mencionaron sus obras Los albañiles –cinta dirigida por Jorge Fons, ganadora del Oso de Plata y nominada al Oso de Oro en el Festival Internacional de Cine de Berlín (1977)– y Estudio Q, traducida a versión cinematográfica.
Sobre su labor como guionista en la pantalla grande, los participantes de la charla mencionaron películas como El callejón de los milagros (1994), La Ley de Herodes (1999) y El crimen del padre Amaro (2002), entre muchas otras.
Además de ser miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, Vicente Leñero fue distinguido con innumerables reconocimientos como los premios Biblioteca Breve en 1963 por Los albañiles; el Mazatlán de Literatura 1987 por Puros cuentos; el Nacional de Literatura Juan Ruiz de Alarcón 1992 por su trayectoria como dramaturgo, y el Nacional de Periodismo Cultural Fernando Benítez 1997.
También recibió el Premio Xavier Villaurrutia en el 2000 por la antología La inocencia de este mundo y el Premio Nacional de Literatura y Lingüística en 2001.
A propósito de su aniversario luctuoso este 3 de diciembre, el Canal 22 anunció que transmitirá el programa Vicente Leñero: Especial In Memoriam a las 21 horas. En él se hace un repaso por la trayectoria del escritor. Al terminar, se proyectará la cinta Los albañiles.