Hay que parar la Liga Mx en desafío a Televisa: Maurer

domingo, 15 de octubre de 2017 · 09:29
Emilio Maurer, el empresario poblano que en la década de los noventa fue a la cárcel tras enfrentarse con la televisora de Emilio Azcárraga Milmo y quitarle los derechos de transmisión de la Selección nacional de futbol, habla con Proceso sobre el reciente contrato que la Femexfut renovó con Televisa, que representa la oferta más pobre en comparación con la del empresario Carlos Slim, NBC Universal y Telemundo. “Los equipos que no están de acuerdo con el arreglo deben parar la liga. Tienen la fuerza para hacerlo”, arenga. CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).-Emilio Maurer, la persona que se levantó contra Televisa hace casi tres décadas al despojarla de los derechos de transmisión gratuitos de la Selección nacional, y que a raíz de eso terminó en la cárcel siendo un alto directivo de la Federación Mexicana de Futbol (Femexfut), asegura que los dueños de los equipos de la Liga Mx desaprovecharon una oportunidad histórica de cambiar el rumbo de este deporte al autorizar la renovación del convenio con el consorcio televisivo a un costo menor de la oferta del empresario mexicano Carlos Slim. Para Maurer, cuyo desafío al Grupo Televisa también le costó la forzada venta del club Puebla, su posterior expulsión del futbol profesional y, como remate, haber sido etiquetado persona non grata dentro de este ámbito deportivo, afirma que el balompié nacional sólo progresará “el día que se sacuda de Televisa”. Ahora, el hombre que alguna vez le quitó a la televisora de Emilio Azcárraga Milmo el poder sobre el futbol mexicano aconseja a los directivos de Monterrey, Tigres y de las franquicias del Grupo Pachuca (León y Tuzos), quienes se opusieron a la reciente cesión de los derechos televisivos a Grupo Televisa, “actuar en consecuencia y parar el futbol”. Entrevistado por Proceso, el ganadero poblano se ufana de que el único antecedente sobre una nueva era en el futbol mexicano es la etapa en la cual él coincidió con Francisco Ibarra en la cúpula de la Federación Mexicana de Futbol, en la década de los noventa. Ambos, afirma, eran la única voz disidente. Presume también de que se lograron avances significativos para el futbol nacional durante su gestión, además de haberle retirado a Televisa el manejo de la Femexfut y los derechos de “gratuitos” que tenía sobre la Selección Mexicana, obligándola a pagar 5 mil dólares por un juego amistoso que transmitió, previo a la Copa del Mundo Italia 90, en la que el Tri fue descalificado por el escándalo de Los Cachirules. “Fue el último partido de ese ciclo mundialista con Televisa, porque se le venció el contrato; 15 días después jugamos un amistoso contra Brasil, en Los Ángeles, y de un día a otro, en un hecho histórico, la empresa de Azcárraga Milmo nos ofreció 75 mil dólares por la exclusividad de la Selección nacional. Para que vea la diferencia: posteriormente le vendimos los derechos a Imevisión –ahora TV Azteca– en 120 mil dólares”, relata el exdirectivo. Para Maurer, el nuevo contrato firmado el pasado 29 de septiembre entre la Femexfut y la televisora de Emilio Azcárraga Jean, tiene más inconvenientes que beneficios para la Selección nacional, y asegura que Grupo Televisa se aprovechó del “pánico” que causa entre los propietarios de los equipos de la Liga Mx. “Es increíble que los dueños de los equipos se dejen mangonear. De verdad, no los entiendo. ¿Qué pasó?, se las hicieron a tal grado que ni siquiera les permitieron ver el contrato, se los escondieron. Todo lo manejaron por debajo del agua y, pese a ello, se dejaron. Allá ellos...”, dice. Miedo entre los de pantalón Maurer también hace un reclamo a las directivas disidentes, pues asegura que no basta con que Tigres, Monterrey, Pachuca y León hayan votado contra la renovación de la federación con Televisa. “No sólo es unirse. Hay que actuar en consecuencia”. Puntualiza: “En todo el mundo, quien vende un producto se anuncia y trata de ofrecerlo lo más caro que se pueda, pero con la Federación Mexicana de Futbol no sucedió igual; vendieron su producto lo más barato que se pudo, porque al que ofrecía más no lo quisieron. ¿No le parece un caso de locos? “Eso es verdaderamente absurdo, pero con la fuerza que tienen Grupo Pachuca, Monterrey, Tigres e, incluso, Chivas, que tampoco votó por la medida, pueden parar el futbol. “Si en nuestros tiempos Paco Ibarra y yo hubiéramos tenido el apoyo de Monterrey, Tigres, Grupo Pachuca y Guadalajara, como están ahora de fuertes, sobre todo por los recursos económicos que respaldan a estas empresas, ¡hombre, por favor, movemos al mundo! Nosotros teníamos menor fuerza, tanto así que nos dieron en la madre.” –¿Los dueños de los equipos dudan en confrontar a Emilio Azcárraga? –Le tienen pánico. Muchos piensan en las amenazas del empresario que pueden manifestarse vía el arbitraje en perjuicio de sus equipos o de manera personal. “Por lo general –explica el exdueño del Puebla–, estos directivos tienen otras prioridades y el futbol es secundario. Entonces, el futbol se convierte en un negocio más y deciden que no se van a pelear con Televisa, porque igual les puede armar una campaña de desprestigio contra sus empresas y de sus asuntos principales. Por lo tanto, aceptan que lo mejor es ‘el ahí se va’.” Emilio Maurer recuerda que padeció las consecuencias de su osadía de enfrentar a Emilio Azcárraga Milmo, padre del actual propietario de Grupo Televisa: “Le gané, pero estuve en la cárcel un día, dos días... pocos días, pero ahí estuve”. –Después de todo, ¿se arrepiente de su decisión? –No me arrepiento de nada. La verdad, estoy orgulloso y retirado del futbol desde hace años. Me siguen buscando, como ahora para esta entrevista, y algunas personas admiran lo que hicimos. A mis años es bonito que nos tomen en cuenta. –Al parecer no se aprendió de la lección experimentada con ustedes –se le menciona. –La verdad no. Es una verdadera lástima. Nunca he visto a alguien que venda su producto lo más barato posible. Todo mundo gasta un dineral en publicidad. En ese sentido, las agencias de publicidad son fabulosas con tal de que su producto sea reconocido y puedan venderlo lo más caro posible. Pero sucede que el futbol mexicano, que es un producto conocido, y la Selección nacional, únicos en el mundo y que tienen dos casas, en Estados Unidos y en México, venden su producto lo más barato posible. –¿Sólo así se entiende que la federación haya desechado la propuesta conjunta presentada por Carlos Slim, NBC Universal y Telemundo? –Así fue. Entre más lo platica uno, menos lo cree. En la federación está de por medio su presidente, Decio de María. No es que Decio sea leal o no a Televisa; es el empleado de esa empresa. Aunque De María representa a la federación, recibe órdenes de la televisora. “Televisa siempre gana; no el futbol mexicano. La lucha de Televisa no es en pro del futbol mexicano. Es en pro de Televisa. Es la empresa que explota el futbol en este país y no vive para el futbol”, añade. Maurer fue destituido de la presidencia de la Primera División –hoy Liga Mx– en octubre de 1992, dos años después de su designación, cuando Francisco Ibarra fue electo presidente de la Femexfut. Los detractores de Maurer en la federación lo forzaron a vender sus acciones del Club Puebla, fue expulsado de por vida del futbol y posteriormente encarcelado. Se le acusó de “malos manejos financieros” y Televisa recuperó los derechos de transmisión que desde entonces tiene. El cuestionado arreglo El viernes 29 de septiembre, a raíz de un pacto no libre de controversias e intimidaciones, Grupo Televisa se quedó otra vez con los derechos de transmisión de la Selección Nacional por un periodo de ocho años, que comprende dos ciclos mundialistas. Lo operación se concretó aun cuando la oferta conjunta de las cadenas NBC Universal, Telemundo y América Móvil, ésta propiedad de Carlos Slim, superaba a la de Azcárraga Jean. Los responsables de negociar los derechos de comercialización del tricolor ni siquiera permitieron que la propuesta de Slim fuera analizada sobre la mesa. Así, los partidos de las selecciones nacionales se seguirán viendo por los canales de televisión abierta de Televisa como ha sido desde octubre de 1992, cuando retomó el control sobre la Femexfut. Además, la empresa de Azcárraga revenderá parte de los derechos a Televisión Azteca, dueña de los equipos Atlas, Morelia y Puebla. Las cifras del convenio no fueron reveladas por la Federación Mexicana de Futbol ni por el Comité de Comercialización encargado de las negociaciones. Información extraoficial indica que Grupo Televisa ofreció 200 millones de dólares y que el grupo integrado por Carlos Slim puso sobre la mesa 260 millones de dólares para adquirir los derechos de transmisión en Estados Unidos y en plataformas digitales. El acuerdo alcanzado por Televisa comprende los periodos mundialistas de Qatar 2022 y el del Mundial de 2026, cuya edición México aspira a organizar de manera conjunta con Estados Unidos y Canadá. La Femexfut negoció el contrato con Televisa mediante su Comité de Comercialización, integrado por las directivas de los equipos Santos Laguna, Xolos de Tijuana, Pumas de la Universidad y Monterrey. El jueves 28 de septiembre, un día antes de la reunión del referido comité en la que se decidió el futuro de las transmisiones de los juegos del Tri, el presidente del Consejo de Administración del Club Monterrey y también alto funcionario de Femsa, José González Ornelas, abandonó en forma abrupta el encuentro. Ese día, el directivo regiomontano fue acusado por el noticiario Las Noticias de Televisa Monterrey, conducido por Gregorio Martínez, de no respetar el código de ética de la Femexfut. Con base en un supuesto comunicado del organismo de futbol, la televisora fustigó a González Ornelas al señalarlo públicamente de violar el acuerdo de confidencialidad y de utilizar su posición en dicho comité para filtrar información a terceros relacionada con las negociaciones sobre los derechos televisivos. En concreto, se le acusó de haber proporcionado datos relevantes a América Móvil de Carlos Slim. Dicho documento no figura en ninguna de las plataformas de la Femexfut. Horas después, el Club Monterrey difundió un comunicado en el que responde que las acusaciones de Televisa carecen de apego a la verdad, pues están “asentadas en un documento que no tiene rasgos que lo oficialice como una firma, remitente o un membrete oficial vigente”. “Lamentamos la generación y tratamiento de dicha información que pretende afectar a una institución y a una persona cuyo empeño y responsabilidad es la búsqueda de lo mejor en materia de derechos de transmisión televisiva de las selecciones nacionales”, expuso el Club Monterrey. Sin embargo, la activa participación de José González fue evidenciada el pasado lunes 2 por Jesús Martínez Patiño, dueño de los equipos Pachuca y León de la Liga Mx. En entrevista con la cadena ESPN, Martínez aseguró que los propietarios de los clubes fueron amenazados por Televisa para aceptar su propuesta y reveló que el directivo de Monterrey lo contactó para ofrecerle pormenores de las negociaciones: “Recibo una llamada de un hombre intachable como Pepe González Ornelas, quien me dice: ‘Oye, Jesús, me están presionando para que firme la situación de que estoy de acuerdo –basado en una cláusula de renovación automática del contrato vigente con Televisa–, y yo no voy a fallar’. Él me informó de la situación”, expuso Martínez. El dueño de Grupo Pachuca también tronó contra la Femexfut al asegurar que les ocultaron a los presidentes de los equipos todas las ofertas que había. Dijo que “tres meses antes” llegó a las oficinas de la federación una propuesta de Telemundo solicitando entrar a la puja por los derechos de transmisión, pero que De María no la hizo llegar a los directivos. “El presidente de la federación y el presidente de la Liga Mx (Enrique Bonilla) han operado excelentemente bien. El problema es cuando vienen las decisiones trascendentales en que no pueden ser juez y parte”, cuestionó Martínez. El directivo de los Tuzos reiteró que hubo amenazas: “¿Cómo no nos van a dar el contrato como socios? Nos están amenazando. Esas palabras utilizaron, de que hay una cláusula de renovación automática. No sé ni en qué letras, porque no nos daban el contrato. No estoy contra Televisa ni de Azteca ni de ESPN ni de Fox... “Alejandro Irarragorri me dijo que tenemos muchos avances y nos ofrecen 100 millones de dólares por cuatro años en los dos países, y mi postura es que no vamos a aceptar. No pueden firmar nada, porque primero hay que decirle a todos los demás socios y tenemos la facultad de negociar, mas no de decidir”, relató Martínez. El empresario también exhibió la división que ocasionó la renovación del contrato con Televisa al admitir que Irarragorri, presidente del Club Santos, quien encabezó las negociaciones, dejó de ser su amigo. Ahora “será un compañero; cada quien que se haga responsable de sus hechos”. El presidente del conjunto hidalguense confirmó que la oferta conjunta de Telemundo, NBC Universal y América Móvil era de 260 millones de dólares sólo por los derechos de transmisión en Estados Unidos y plataformas digitales, y que la propuesta inicial de Televisa rondaba los 100 millones de dólares por cuatro años. Proceso buscó hablar con José González Ornelas, directivo del Club Monterrey, quien es acusado por Televisa de violar acuerdos de confidencialidad; con Alejandro Rodríguez, presidente de Tigres; con Jesús Martínez Munguía, directivo del Club León, y con Arturo Elías Ayub, de Grupo Carso, empresa de Carlos Slim. Todos rechazaron responder a la entrevista. Este reportaje se publicó el 8 de octubre de 2017 en la edición 2136 de la revista Proceso.

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