Tras la muerte del Ascenso, la inanición de las ligas inferiores del futbol nacional

viernes, 31 de julio de 2020 · 18:30
Dueños de equipos de futbol de segunda y tercera divisiones muestran su escepticismo sobre el futuro del balompié nacional. Consultados por Proceso, varios de ellos sostienen que quizás el próximo torneo se posponga para el próximo año y algunos terminen por retirarse. En la Liga MX, donde ya no habrá ascenso ni descenso, dicen los entrevistados, se privilegia más el dinero que el futbol; ya no hay competencia sino intereses económicos. Así, dice uno de los entrevistados, para qué meter dinero a los clubes a lo tonto. CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- La Liga MX blindó a los clubes de su principal categoría con la anulación del descenso, pero no logró impedir la desbandada de los dueños de franquicias en la Liga Premier (Segunda División) y la Tercera División Profesional (TDP), desengañados de invertir millones de pesos a cambio de acceder a la disputa de un simbólico trofeo y medallas. La osadía de la Liga MX dejó en situación vulnerable a estos inversionistas de la segunda y tercera divisiones, donde al menos una docena de equipos han decidido no participar el próximo torneo. De momento, en la Liga Premier ya se bajaron el Club Deportivo Tepatitlán de Morelos y Tlaxcala FC, que ahora participarán en la Liga de Expansión, que reemplaza al extinto Ascenso MX. No obstante sigue latente el riesgo de que la lista se desintegre. En el caso de la TDP, es factible que de las 186 franquicias que tomaron parte en la inconclusa temporada anterior, una veintena no compita en el siguiente torneo, aun cuando el secretario general de esa división, Rafael Pérez, considere que cualquier ausencia será compensada con nuevos afiliados. Tres meses después de la anulación del descenso, Miguel Ángel Rogel, dueño del Atlético Estado de México en la Liga Premier y Linces de Tlaxcala en la TDP, está inconforme con la medida y confirma a Proceso que no participará en la Segunda División; incluso, dice, analiza la posibilidad de retirarse también de la tercera. “Sólo un tonto se atrevería a invertir 9 o 10 millones de pesos por temporada en la Liga Premier únicamente por un trofeo y unas medallas; no hay expectativa de nada. Nadie de la Liga MX voltea a decirte: ‘Me interesa este jugador, véndemelo; te pago los derechos de formación’. ¡Nadie voltea a ver a esa liga! “Para los inversionistas ya no es viable gastar millones en un proyecto en el que no te permiten ascender. De hecho, ya tengo a la venta los equipos”, enfatiza Rogel.

Liga espectral

De momento, más de una docena de franquicias confirmaron su salida de la Liga Premier, como Correcaminos, Club Calor de San Pedro, Yalmakan FC, Tuzos de la Universidad Autónoma de Zacatecas, Atlético Bahía, Cuervos de Ensenada y Coras de Nayarit, sostiene Rogel. Y agrega: “Varios equipos de la Segunda División manifestaron que no van a participar en la siguiente temporada, que tentativamente iniciará en agosto o septiembre”. Sólo Atlético Reynosa no obtuvo la certificación de la Liga MX para incursionar en la naciente Liga de Expansión, que se disputará con 16 equipos, por lo que estaría de vuelta en la Liga Premier. Sí fueron aprobados Tlaxcala FC y Club Deportivo Tepatitlán. “Eran de los equipos más importantes de este sector. Se van y dejan descubierta a esa categoría” –advierte Rogel–. De por sí esta liga ya venía complicándose desde hace dos años, cuando las filiales dejaron de participar, como América, Puebla, Pumas y Pachuca. “Todo mundo habla de la inminente desaparición de la Liga Premier, que no tiene razón de ser, y seguramente la Tercera División será una consecuencia de eso.” Para empeorar, afirma: “La Liga Premier está en ruinas, está en cenizas. Mis colegas también consideran la posibilidad de parar la franquicia hasta que haya una nueva reglamentación y muchos de ellos piensan en irse a la Liga de Balompié Mexicano”, de reciente formación, como alternativa para aquellos que no consiguen trabajo en las competencias avaladas por la Liga MX. “Lo que hicieron (los dueños de los equipos) es grave. Aquí hay algo más de fondo: hubo una complicidad, porque sin los votos de la Segunda División, la Tercera División y el Sector Amateur no hubieran podido desaparecer el Ascenso MX. Y ahora ya no hay ni un motivo, ningún objetivo que perseguir. “Sin jugarle al pitoniso le puedo decir en un 80% que el torneo va a desaparecer. ¿Quién va a pagar 250 mil pesos por el derecho de participación? Échele otros 250 mil por el registro, más viajes, comidas y sueldos. ¿Quién va a querer pagar 9 o 10 millones de pesos al año por un trofeo?, porque no hay posibilidades de ascender a ningún lado.” La decepción es brutal, reitera. “El gasto ya no tiene ningún sentido y las inversiones que se hicieron no valieron nada. En los cuatro años que mi equipo compitió en la Liga Premier gastamos en promedio entre 10 y 12 millones por año. ¿Y de qué valió, de qué sirvió? Con la pena, dejaremos estadios, patrocinios de la televisión mexiquense y de muchas empresas que nos estaban ayudando, pues imagínese el malestar que hay con José Vázquez –titular del sector– al perder todo esto e irnos”. A falta de la confirmación, el empresario está enterado de que la Liga Premier prevé posponer el inicio del torneo hasta el próximo año. La idea es persuadir a los equipos para iniciar actividades en enero y así soportar mejor la contingencia y reforzar la estructura financiera de las franquicias.

Futuro yermo

En una temporada atípica, luego de la cancelación de los torneos por la pandemia, la temporada 2020 de la segunda y tercera divisiones también terminó sin un campeón, al igual que en la Liga MX y Ascenso MX. El formato de la Liga Premier, que en realidad se trata de la Tercera División, ya que tiene por delante a la Liga MX y la denominada Liga de Expansión (antes Ascenso MX), se divide en Serie A, formada por 29 equipos, y Serie B, en la que compiten 14 franquicias. La TDP se integra con 13 grupos, de los cuales sólo el sector 2 tiene confirmado a los 17 equipos, según se ratificó en una de las cuatro asambleas virtuales de la liga, efectuadas entre el martes 21 y el viernes 24. Rogel se retiró de la Liga Premier hace un par de años por los problemas que tiene con el titular del organismo, José Vázquez Ávila, cuando el empresario adquirió en 2015 la franquicia –en disputa legal– Atlético Estado de México con el aval del propio directivo (Proceso 2124). “Ya no era conveniente seguir en la Liga Premier; ahora, con lo que acaba de pasar con el Ascenso MX, ¿cuál sería el objetivo, motivo o razón para seguir gastando dinero a lo estúpido?”, dice Rogel para justificar su declinación. Para el empresario, la intención es clara: La Liga MX está destinada a convertirse en un modelo idéntico a la Major League Soccer (MLS), de Estados Unidos, sin ascenso y sin descenso. “Eso quiere decir que la MLS ha tenido mucho más éxito comercial y futbolístico que la nuestra en tantos años. Sin duda alguna, la MLS le ha puesto la muestra.” Los problemas se acumulan en las divisiones inferiores desde que la Liga MX suspendió el descenso. El director deportivo de Atlético Estado de México y Linces de Tlaxcala, Édgar Villanueva, sostiene que la medida fue desatinada. De por sí, dice, resultaba difícil que los equipos de la Liga Premier cumplieran con el requisito de estadios con aforo para 15 mil personas. “Casi no hay inmuebles con ese cupo y empresarios que inviertan en la construcción de un estadio. Y los que son propiedad de los gobiernos estatales tampoco reúnen las condiciones que exige el reglamento de la federación. Loros de Colima, explica, fue de las franquicias económicamente más poderosas en el desaparecido Ascenso MX, pero tras la muerte de su dueño, Jimmy Goldsmith, su familia decidió no gastar más en el futbol. Goldsmith, acaudalado empresario de origen británico, falleció el pasado 23 de diciembre. Formó parte del comité organizador de la Copa del Mundo México 1986, fue coordinador de Asuntos Internacionales de la Federación Mexicana de Futbol, y además de invertir en empresas del ramo farmacéutico y alimenticio, ostentó la propiedad del equipo Cihuatlán, que ganó títulos en las segunda y tercera divisiones.

Los gastos se multiplican

En opinión de Villaueva, la modificación de la Liga MX acabó “por matar el espíritu de competencia: el ascenso. Les complicó más la existencia a los equipos, porque gastan más. Lo peor es que ese dispendio no te retribuye ningún beneficio. En el caso de las franquicias de la Tercera División, quizá la situación es un poco distinta, pues es más de carácter formativo”. Para sobrevivir, la mayoría de los equipos cobran los registros al futbolista. “No calificaría este cobro como malo o bueno, porque los equipos pueden justificar que están formando a un jugador como si se tratara de una escuela particular. Al final, puede ser un esquema de negocios”, comenta Villanueva. El monto del cobro de registro depende de cada equipo. En ese sentido, las tarifas oscilan entre 15 mil y 30 mil pesos por temporada. El monto, dice, depende del esquema de cada franquicia. Por ejemplo, hay planteles que viajan mucho, por lo que requieren más ingresos. Y hay aquellos que están en cierta localidad y no necesitan de largos traslados. De acuerdo con el director deportivo, a través de este sistema los equipos pueden permanecer en la TDP, a diferencia de la Liga Premier, “donde los gastos se multiplican hasta cinco o seis veces”. Por ejemplo, agrega, en la TDP un equipo desembolsa entre 1 millón 300 mil y 1 millón 400 mil pesos para afrontar el torneo. En cambio, en la Segunda División, “nosotros que ya la tuvimos, para poder competir verdaderamente requieres por lo menos 9 millones de pesos, porque todo es más caro: viajes, sueldos, arbitraje e inscripción. Todo eso se multiplica seis u ocho veces”. Al igual que Rogel, Villanueva considera poco viable un proyecto en la Liga Premier para que los inversionistas gasten en un equipo en el que no te permiten el ascenso, e ironiza: “La decisión está bien planeada, hecha a conciencia y bien pensada, pero para favorecer a los de la Liga MX”. En consecuencia, afirma, esas decisiones sólo benefician a dichos clubes y afectan a los demás. “No les importa la Liga Premier ni la Tercera División. Les interesa salvaguardar a los clubes de la Liga MX”. –¿Qué futuro les espera a estas ligas? –De entrada, disminuirá el número de equipos que participará en la siguiente temporada si es que deciden iniciar en agosto o septiembre. Si no te dejan ascender porque no cumples los requisitos, tal vez pueden compensarlo con un premio económico. Por decir una cifra: 8 millones de pesos para el campeón de la Liga Premier y 1 millón de pesos para la Tercera División. –¿Quiénes están dispuestos a seguir bajo estas condiciones? –Por lo que he hablado con compañeros y jugadores de otros equipos, se calcula que en estos momentos hay una disminución aproximada de 30% de los equipos. Estamos hablando de que al menos 60 franquicias están en espera de confirmar si participan o parar un año al equipo, porque se vuelve una cadena: como la mayoría de ellos cobran por el registro, los padres de familia no están en condiciones de pagar en estos momentos.

El torneo tendrá que retrasarse

Hasta hace un año se pagaba a la Liga Premier por una franquicia de la Serie A 4 millones de pesos, más IVA, y 2 millones más IVA el derecho a participar en la Serie B. La situación es distinta en la TDP, donde se cubre una cuota de 1 millón de pesos, más IVA.
Reportaje publicado el 26 de julio en la edición 2282 de la revista Proceso.

Comentarios