Denuncian omisión de fiscalía y de la PGR en caso de ganadero "levantado"

jueves, 4 de diciembre de 2014 · 14:50
CHIHUAHUA, Chih., (apro).- Desde 2013 la Fiscalía Zona Occidente y desde julio pasado la Procuraduría General de la República (PGR) tienen información sobre la presunta participación del actual alcalde de Madera, Pablo Granados Rascón, en la desaparición forzada de un ganadero y de la ubicación de una fosa clandestina, sin que hasta el momento ninguna de las dos instancias haya emprendido acción alguna por esclarecer ambos hechos. Según los datos contenidos en la indagatoria iniciada en la Fiscalía estatal número 7157-012346/2013, los hechos ocurrieron el 3 de enero 2012, cuando Abel Corral Salcido se dirigía al rancho El Aguaje, ubicado en el poblado de Nicolás Bravo, municipio de Madera, para darle de comer a los animales. Antes de lograr su cometido, un grupo de sujetos lo secuestraron y se llevó maquinaria, ganado y vehículos. De acuerdo con las denuncias contenidas en la investigación, varios hombres, entre ellos un amigo de Abel Corral, llegaron a la casa donde vivía con su expareja sentimental, Evangelina Armendáriz Sosa, a quien le preguntaron si tenía información sobre la privación de la libertad de su pareja. La mujer respondió que no, por lo que dieron parte a las autoridades castrenses destacamentadas en Casas Grandes. Las autoridades hicieron preguntas a los familiares y prometieron darle seguimiento al asunto, pero sólo se limitaron a interrogar a amistades de Corral, y al vaquero de Abel, Manuel Estrada. Este último declaró en su momento que llegaron unas personas a decirle que no dejara de trabajar, que todo seguía normal, pero que en un lapso de cinco semanas vaciaron el rancho y casa de Abel Corral. Los hombres vendieron más de mil vacas a Pedro Sáenz de Gómez Farías, marcadas con el 80 y con otro fierro en forma de trompo; se llevaron seis tractores, tres combinados, tres pick up usadas, una blazer, cuatro trocas de tonelada, tres trocas F-150 nuevas, 4 trocas de volteo, tres empacadoras, dos acicaladoras, un tractor de mano de chango, dos molinos para moler pastura, una retroexcavadora, tres remolques, tres terroneras, dos trailas para mover ganado, cuatro motos, una batidora de cemento, dos generadores grandes, cargadores de baterías, dos cultivadores, tres arados, dos molinos para sembrar avena, dos empacadoras, también marranos, borregos, 12 caballos, tranques de diésel, soldadoras”, según consta en actas. Los registros y documentos de lo que se llevaron se encontraban en la casa de Abel Corral, pero la familia de éste no se han parado por ahí por temor a sufrir algún atentado, luego de que el vaquero Manuel Estrada les informó que los ladrones le entregaron todo a Socorro Vázquez Barragán, de aproximadamente 50 años, quien en ese momento era jefe de Obras Públicas en el ayuntamiento de Madera. (Socorro Vázquez Barragán es oriundo de Nicolás Bravo y se menciona como una de las dos cabecillas que podrían disputarse el liderazgo del Cártel de Juárez, luego de la detención de Vicente Carrillo Fuentes El Viceroy). “Juan Vázquez Barragán, hermano de Socorro, trae los vehículos de mi hermano, baja madera en ellas y Jesús Armando Vázquez Barragán Chumando también traer trocas bajando madera; Arturo Vázquez Terrazas El Carchorro es hijo de El Valiente, José Luis Vázquez Barragán El 20, mismo que está detenido por sus presuntos vínculos con la organización delincuencial de La Línea”, declaró uno de los testigos. También refirió que Vázquez Barragán radica entre Casas Grandes y Nicolás Bravo y que la herramienta sustraída de la casa del ganadero desaparecido estuvo guardada en la casa de Flavio Vázquez Luján *Pancho*. Un familiar de Abel Corral relató que en repetidas ocasiones yo le llamaba a Pablo Granados Rascón (actual presidente municipal) para saber si tenía noticias de mi hermano y lo único que me contestaba es que llamara a la presidencia para que me ayudaran, pero ya después él me dijo que porque le llamaba a él, que él no tenía nada que ver, inclusive me amenazó diciéndome que nos diéramos en la madre”. Asimismo dice que días antes de su desaparición, Abel Corral le comentó que habían vendido 400 borregos a una persona y que Pablo Granados se enojó porque quería que se los vendiera a él. “Abel fue a platicar con Pablo Granados para decirle que no se molestara que él se los había vendido a quien se los pagaba mejor y que en esa ocasión, Pablo se encontraba en compañía de Socorro Vázquez…. En una ocasión, en una fiesta del pueblo, Pablo Estrada le dijo a Abel que no le habían ‘dado pa’bajo porque él no quería”, contó. Los familiares señalan que Abel Corral iba y venía de Estados Unidos a trabajar su tierra y mientras estaba en Estados Unidos, su pareja Evangelina tenía reuniones con Socorro Vázquez y Pablo Estrada en su casa, a quienes acusan de la desaparición de Corral Salcido. En sus declaraciones, los denunciantes también mencionaron que en un “pueblito que se llama El Escondido, hay un cementerio clandestino entre los arsenales, son montañas de arena, se distingue desde la carretera e inclusive ahí hay dos generales del Ejército enterrados--- Pablo Granados, Socorro Vázquez Barragán, Juan Vázquez Barragán, Jesús Armando Vázquez Barragán ‘Chumando¡, Arturo Vázquez Terrazas, José Luis Vázquez Barragán, se dedican al narcotráfico, pedían vacas grandes para pagar, que a veces las tenía que llevar al rastro de Madera, que cada una de estas vale aproximadamente 2 mil pesos”. Luego de no ver resultados del trabajo de la Fiscalía estatal, el 14 de julio último decidieron interponer una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR). Por esos hechos, la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas de la Subprocuraduría de Derechos Humanos inició la indagatoria AC/PGR/SDHPDSC/UEBPD/M2/1072/2014. En la PGR les practicaron una prueba de fluido corporal para obtener perfiles genéticos de la familia y manifestaron que la denuncia ante la Fiscalía la hicieron hasta 2013 por el temor con el que se vive Madera, ya que la gente del pueblo sabe quiénes desaparecieron al ganadero pero nadie dice nada por miedo. Antes de la denuncia, precisan, uno de los familiares “fue amenazado por Pablo Granados actual presidente municipal de Madera, quien en ese momento era presidente del Consejo Administrativo de Colonia Nicolás Bravo, es decir, él reparte las regalías de la madera que se vende y que tuvo problemas con Abel cuando él tenía ese cargo, ya que decían que no era equitativa la repartición”. Y dejaron asentado que en colonia Nicolás Bravo, del mismo municipio de Madera, hay cientos de personas desaparecidas, así como en el poblado de Yuma hay alrededor de 600 familias que tuvieron que desplazarse para proteger su vida; en El Alamillo quedan unas 38 familias de las mil 200 que había. “A la única autoridad que le tienen respeto es a la Marina, porque a las otras autoridades las tienen compradas”, concluye otro de los testigos.

Comentarios