MADRID (apro).— La célula islamista detenida esta semana en España, planeaba cometer atentados en suelo español y tenían intención de cometer un secuestro y degollar a la víctima ante una cámara de video para luego difundir las escenas por internet, al estilo del Estado Islámico, según fuentes de la fiscalía. Una operación policial bautizada como Caronte, llevada a cabo por los Mossos de Esquadra, la policía autonómica de Cataluña, reveló que a los 11 detenidos les incautaron fotografías de los edificios donde planeaban atentar, entre ellos el Parlamento de Cataluña, un céntrico hotel de Barcelona y una comisaría de los Mossos. Los atentados estaban en una etapa de preparación pero iban avanzando en sus pretensiones de cometerlos en breve. Al secuestrado, planeaban vestirlo de color naranja, tal y como lo hace el EI en los videos donde ha degollado a sus víctimas en cautiverio. También hoy se conoció el auto del juez de instrucción de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz en el que dicta auto de prisión a siete de los diez detenidos –una más es menor de edad— e identifica como el líder de la célula al español Antonio Sáez Martínez, con alias Alí el peluquero. Esta persona también organizaba un atentado contra una librería judía en Barcelona, para lo cual contactó con un conocido de ideología neonazi llamado Diego Frías, quien “odia a los judíos” y tiene “capacidad de conseguir armas y materiales explosivos”. Del auto del juez se desprende que las intervenciones de sus comunicaciones telefónicas permitieron conocer que tenían identificada a una mujer responsable de una entidad bancaria a la que iban a secuestrar para obtener fondos. A petición de la fiscal Dolores Delgado, el juez Pedraz envió a prisión a siete de los interrogados por delitos de pertenencia o colaboración con organización terrorista y tenencia de armas de guerra. A todos les incautaron material informático y documentos en los que se les relaciona con la lucha del Estado Islámico, que controla amplias zonas de Siria e Irak. Esta célula inició su actuación captando y adoctrinando a muyahidines para unirse en Siria e Irak al Estado Islámico. Tres de sus enviados fueron capturados cuando estaban en tránsito hacia Siria. Fue entonces que la célula empezó a preparar sus atentados en suelo español. Entre el material asegurado está una granada, armas de fuego, munición y cuchillos de gran tamaño, así como manuales para la fabricación de explosivos y de productos químicos. Los Mossos de Esquadra identificaron que de los detenidos cuatro españoles y uno de origen paraguayo se radicalizaron en un año.