CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En una jornada que se caracterizó por la volatilidad, la mezcla mexicana de petróleo tuvo este jueves una ganancia de 6.8% y se cotizó en 26.15 dólares. De acuerdo con Petróleos Mexicanos (Pemex), los precios internacionales del crudo están a la espera de un posible acuerdo entre las naciones integrantes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para reducir el suministro del combustible, que se encuentra sobreofertado a escala mundial. Lo anterior se suma a la débil demanda internacional, particularmente de China, el segundo importador más grande del planeta. Y en Estados Unidos se registra cada semana una mayor cantidad de reservas. De esta forma, el referente estadunidense West Texas Intermediate (WTI) cayó 1.73% y cerró en 31.72 dólares por barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York. Por su parte, el Brent o petróleo del Mar del Norte retrocedió 1.7% en el mercado de Londres, cotizándose en 34.46 dólares por barril. Este día el Banco de México (Banxico) recomendó al gobierno federal realizar ajustes en la empresa petrolera dirigida por Emilio Lozoya, que ya ve afectadas sus finanzas con una elevada deuda, poca producción y nula rentabilidad, pese a la reforma energética. De hecho lo único que ha ganado Pemex es la desconfianza de agencias calificadoras como Moody’s Investor Service, que de plano bajó su calificación crediticia, mientras que Standard & Poor’s colocó una nota “baja” a la “empresa productiva del Estado”. El banco central advirtió que de no realizarse el ajuste se incrementaría la desconfianza en México por parte de los inversionistas, pese a su estabilidad macroeconómica y el manejo de la política monetaria.