CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Una cafetería de la localidad de Balad, al norte de Bagdad, y centro de reunión de aficionados del equipo español de futbol, Real Madrid, sufrió un ataque con disparos y explosivos que dejó un saldo de 16 personas muertas. El ataque ocurrió la noche del jueves pasado y reivindicado por el autodenominado Estado Islámico (EI). Según una publicación del grupo de aficionados en Facebook en la que condenaron el atentado, éste dejó otras 20 personas heridas. De las víctimas mortales, 12 fallecieron en el ataque a la cafetería y las otras cuatro en un mercado cercano donde uno de los terroristas se inmoló con un chaleco explosivo. Según testigos, el ataque terrorista en Balad inició cuando tres hombres abrieron fuego con sus ametralladoras contra la multitud que estaba en la cafetería. Cuando la Policía llegó, dos de los agresores detonaron sus chalecos bomba y el tercero fue el que se estalló en el mercado. Ante el temor de nuevos ataques, fuerzas de seguridad se desplegaron en la zona. Según fuentes policiales citadas por Reuters, los atacantes pasaron tres puestos de control antes de llegar a la ciudad. El EI salió de Balad, municipio situado a unos 80 kilómetros al norte de Bagdad, en 2014, pero desde entonces mantiene una línea de frente a unos 40 kilómetros. Las autoridades iraquíes están bajo la lupa por las reiteradas fallas en la seguridad que permitieron la ola de ataques sucedidos el miércoles en Bagdad contra objetivos chiitas, que dejaron casi 100 muertos.