CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un hospital fue bombardeado esta mañana en la localidad de Abs, en el norte del Yemen, apenas dos días después del ataque contra una escuela en la provincia de Saada, también al norte yemení, que dejó un saldo de al menos 10 niños muertos y 28 heridos. El bombardeo contra el nosocomio que apoya la organización humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) fue perpetrado por la coalición militar que dirige Arabia Saudita, de acuerdo con un despacho informativo de la agencia EFE. Testigos aseguraron que hay muchas víctimas, entre muertos y heridos, pero no ofrecieron cifras exactas. Uno de ellos, Mustafa Mohamed, precisó que hay decenas de cuerpos y lesionados que están siendo sacados del hospital. El centro médico se ubica en la provincia de Hashah, unos 130 kilómetros al noroeste de la capital, y el distrito de Abs se localiza en la carretera que une el puerto de Al Hudeida, en el mar Rojo, con el paso fronterizo de Harad, el principal entre Yemen y Arabia Saudita. Esta no es la primera vez que un centro médico gestionado por MSF es atacado por los aviones de la coalición árabe en territorio yemení, tal como lo ha denunciado la organización en varias ocasiones, aunque la alianza militar siempre lo ha negado. El bombardeo ocurre después del ataque del pasado sábado 13 contra una escuela en la provincia de Saada, que dejó un saldo de al menos 10 niños muertos y 28 heridos, según el último recuento de MSF. En un posicionamiento, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) señaló esta mañana que el secretario general Ban Ki-moon observa con consternación que los civiles, incluidos los niños, siguen soportando la peor parte del incremento de los enfrentamientos y las operaciones militares en Yemen. Se requiere, dijo, una rápida investigación de este trágico suceso, e instó a las partes “a tomar todas las medidas necesarias para prevenir nuevas violaciones a la ley humanitaria de derechos humanos internacionales y hacer todo lo posible para proteger a los civiles y la infraestructura civil”. MSF, que anteriormente informó de siete fallecidos, señaló que todas las víctimas en el bombardeo a la escuela religiosa de la zona de Haydan, cercana a la frontera con Arabia Saudita, tienen entre ocho y 15 años de edad. La ONG no precisó el origen del bombardeo, pero Saada ha sido blanco en los últimos días de ataques de la coalición árabe, liderada por Arabia Saudí contra los rebeldes hutíes. Unicef confirmó el ataque y lamentó que con la intensificación de la violencia en todo el país en la última semana, el número de niños muertos y heridos por ataques aéreos, combates en las calles y minas terrestres ha aumentado “considerablemente”. La agencia de la ONU hizo un llamamiento a todas las partes en el conflicto yemení a respetar y cumplir con sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional, que exige limitar los ataques a objetivos militares y combatientes para evitar el daño a los civiles. En los últimos cuatro meses, un total de 272 civiles han muerto y 543 han resultado heridos en el conflicto del Yemen, pese al alto el fuego acordado el pasado 10 de abril, informó ayer la Oficina del Alto Comisionado para los Asuntos de los Derechos Humanos de la ONU.