CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Estudiantes, trabajadoras administrativas y profesoras de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) convocaron a conferencia en las instalaciones de su sede administrativa, en la colonia Doctores, para denunciar la “impunidad y omisión en torno a la violencia de género”. “La lucha en contra de la violencia de género no se ha dado desde nuestros órganos de gobierno, sino que ha corrido a cargo, fundamentalmente, de profesoras, estudiantes y trabajadoras, quienes han implementado, desde campañas de lucha, firmas, talleres, diplomados, pronunciamientos y un largo etcétera”, enfatizó la profesora-investigadora Samantha Zaragoza durante el evento. Y agregó: “Estamos implementando un protocolo de atención a casos de violencia, acoso y hostigamiento sexual en el plantel San Lorenzo (colonia Del Valle), mismo que se ha cabildeado en diferentes instancias y espacios, por ejemplo, los diferentes Consejos Universitarios. Pero, desde 2013 hemos pasado por todas las instancias, por todos los consejos (pero) no se ha avanzado. “Estamos en una situación de terrible impunidad, porque no tenemos marco normativo y eso lo saben los profesores, por eso se avanza en el ejercicio de la violencia”. Recordó el feminicidio de la estudiante Martha Karina, asesinada por un compañero de estudios, Cristian Ortiz Reyes en las inmediaciones de la UACM; el de Campira Camorlinga, “asesinada por un sujeto que se hace llamar El Matanovias. Lamentó que, en ese caso, las autoridades dijeran: “No podemos ayudar porque el sujeto es externo a la universidad. ¡Pero Campira era parte de nuestra comunidad escolar!”. Zaragoza indicó que en abril pasado la Comisión de Mediación y Conciliación del Consejo Universitario –que está completamente cooptada– dejó de aplicar el Procedimiento de Atención a la Violencia de Género, lo que deja en estado de indefensión a tres mujeres cuyos casos estaban siendo procesados. “Habría que recordarle a la Universidad que México ha firmado compromisos internacionales para combatir esta violencia”, señaló la académica. Sandra Montiel, quien egresó de la UACM y hoy es trabajadora administrativa, denunció que son decenas los casos no atendidos. “La violencia de género ha sido invisibilizada, ignorada” en la institución “y a las víctimas no se les ha dado el acompañamiento adecuado”, expuso. “Ésta y varias administraciones han obstaculizado el trabajo de esos grupos y de esas personas contra la violencia de género” añadió. Negligencia Respecto de los últimos casos, la estudiante del plantel Cuautepec y exconsejera estudiantil, Yani García, leyó las denuncias enviadas por dos víctimas: una estudiante que sufrió una violación dentro del propio plantel el 3 de noviembre de 2016 y otra que ha denunciado hostigamiento sexual por parte de un profesor. En el primer caso, la estudiante señala haber acudido al Ministerio Público a levantar el acta correspondiente, así como haber informado “personalmente al rector Hugo Aboites: le entregué copia de la denuncia presentada, sin embargo, no recibí ninguna atención ni asesoría por parte de la rectoría, ni del Abogado General, Lic. Alfredo Domínguez Marrufo”. El segundo es el de la trabajadora Erika Vázquez, quien presentó el caso de la profesora Grissel Gómez Estrada, acosada por un profesor de su plantel. “Hace unos días me topé en un evento académico al profesor que me agredió”, señaló en misiva la catedrática. El caso, de acuerdo con las denunciantes, cuenta con un dictamen de un comité de expertas, quienes sí identificaron “violencia de género grave” contra la denunciante, pero el caso es uno de los que se encuentran bloqueados. El colectivo de estudiantes, trabajadoras administrativas y profesora exigió que los casos se retomen de inmediato por la oficina del Abogado General, que la Rectoría instrumente módulos de atención en todos los planteles, y que las comisiones de Mediación y Asuntos Legislativos del Consejo Universitario cumplan de forma ética, asertiva y responsable sus funciones para frenar la violencia de género en la UACM.