CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Luego de la renuncia de Manuel Granados a la presidencia nacional del PRD, el partido informó que, “como lo señala el estatuto”, el secretario general, Ángel Ávila Romero, asumirá el puesto como encargado de despacho. En un comunicado, el partido reconoció “el apego a la legalidad” de Granados al separarse “en tiempo y forma” del cargo. Luego, aseguró que “el PRD no es un personaje, sino la militancia que ha trabajado para construirlo, fortalecerlo y será ésta quien más abonará en este proceso de transformación interna”. También destacó que sigue siendo un partido político “comprometido con la izquierda democrática” y “las causas que le dieron vida”. No obstante, añadió que ahora sus retos son actualizarse, tener mayor competitividad “no para responder las acciones de otro partido, sino para enfrentar las condiciones que hoy afronta nuestro país que, dado los resultados del pasado 1 de julio, son distintas”. Según el comunicado, el partido ya inició un proceso de diálogo y acercamiento con sus militantes y la ciudadanía para definir su rumbo. Por último, aseguró que, derivado de las recientes decisiones tomadas, tendrá un Congreso Nacional “sumamente productivo” que será el “eje de ruta de renovación, apertura y democratización necesario para el PRD”. La mañana de este lunes, Manuel Granados -cercano al exjefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera- difundió en las redes sociales su carta de renuncia a la dirigencia nacional del partido que asumió el 9 de diciembre de 2017. El propósito, dijo en su renuncia, es “cumplir los plazos del encargo originalmente otorgados y no, como en muchos partidos, hacer maquinaciones” para permanecer el puesto.