MÉXICO, DF, 16 de septiembre (apro).- Entre la numerosa producción cultural salida a la luz de las conmemoraciones por la Independencia, de la que se festejan dos siglos --libros, filmes, series televisivas, obras teatrales, etcétera--, dos CD aparecidos en los últimos días son un homenaje destacado: Mi alma mexicana (My mexican soul), selección de música interpretada por la Philarmonic Orchestra of the Americas (con sede en Nueva York) y conducida por la joven directora mexicana Alondra de la Parra, y La Campana de la Independencia, marcha heroica con doce temas nacionales que toca Silvia Navarrete al piano.
Las seis primeras obras del primer compacto son:
Huapango (1941), de Moncayo; Melodie pour violon et orchestre Op. 1 (1890), de Gustavo Ernesto Campa (con Daniel Andal al violín); Intermezzo de Atzimba (1900), de Ricardo Castro: Imágenes (1927), de Candelario Huízar; Concierto del sur para guitarra y orquesta (1941), de Manuel M. Ponce (con Pablo Sáinz Villegas como solista), y Sobre las olas (1884), el célebre vals de Juventino Rosas (en arreglo de Llova).
En el lado 2, siete composiciones:
Danzón 2 (1994), de Arturo Márquez: Sensemayá (1938), de Silvestre Revueltas; El trópico (1954, de la H.P. Suite), de Carlos Chávez; Sinfonía No. 2 Las antesalas del sueño (1993), de Federico Ibarra; Concierto para piano improvisado y orquesta: Il largo (2006), de Eugenio Toussaint; Clepsydra (1990), de Mario Lavista; e Inguesu (2003), de Enrico Chapela.
En cuanto a la música interpretada por la reconocida pianista mexicana, comienza con Ultimas variaciones, de José Mariano Elizaga.
Siguen Vals jarabe, de Aniceto Ortega; La Catedral (nocturno brillante), de Luis Hahn; y Marcha Zaragoza, de Aniceto Ortega.
Vienen luego Marcha fúnebre (en memoria del emperador Maximiliano), de Franz Liszt; Tacubaya (Contradanzas), de Luis Hahn; y también (como en el disco de la Filarmónica de las Américas) Atzimba (Popurri, Drama lírico en tres actos), de Ricardo Castro.
Finalmente: Lamento (a la memoria del gran patricio Benito Juárez), de Felipe Villanueva; Adiós a México, vals de Jaime Nunó (creador de la música del Himno Nacional); La Campana de la Independencia (que da título al disco), de Ernesto Elourduy; y Balada mexicana, de Manuel M. Ponce.