MÉXICO, D.F. (apro).- La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) aseguró que la falta de acuerdos en Estados Unidos por el llamado “abismo fiscal” repercutirá de manera “delicada” a las empresas mexicanas. Luego de que el pasado fin de semana entró en vigor un recorte por 85 mil millones de dólares en el presupuesto de Estados Unidos, el organismo presidido por Francisco Funtanet Mange advirtió: “El tema es delicado para las empresas nacionales por el impacto que esta medida pueda tener en diversos sectores y factores de la producción mexicana, de manera particular por el recorte en los funcionarios aduanales y lo referente al servicio de Homeland Securtiy”. No sólo eso. El sector industrial alertó que la reducción automática del presupuesto en la Unión Americana también puede ocasionar afectaciones para cientos de empresas proveedoras de un mercado estadunidense menos dinámico, así como las consecuencias al sistema financiero marcado por la volatilidad ocasionada por la incertidumbre que este caso genera. “A la industria mexicana le preocupa que esta medida pueda provocar retrasos para diversos sectores productivos del país en sus procesos de exportación hacia nuestro principal socio comercial”, explicó Funtanet Mange. De acuerdo con el organismo privado, el recorte de 85 mil millones de dólares, ocasionado por la falta de acuerdo entre la Casa Banca y el Congreso estadunidense, obligará a reducir el personal e infraestructura en materia de seguridad en aeropuertos y garitas de aquella nación, algo que afectará al procesamiento de visas y procedimientos aduanales. Ante esa situación, el líder industrial recomendó a quienes realizan operaciones de comercio exterior hacia la Unión Americana prever sus operaciones ante algún viaje o trámite aduanal, así como en servicios de internación de personas y exportación de mercancías, ya que se prevén retrasos para esos procedimientos en el cruce fronterizo. La Concamin expresó su respaldo a las autoridades mexicanas para encontrar de manera conjunta los mecanismos y estrategias que permitan operar con normalidad al sector exportador de nuestro país, y se mantengan las expectativas de crecimiento económico e industrial mexicano para este año. No obstante, antes de que concluyera el gobierno de Felipe Calderón los industriales enfatizaron la ausencia de una política industrial que permitiera depender en menor medida de las exportaciones y fortalecer el mercado interno.